Tras la adquisición de Fiorucci, seguirá de cerca el proceso de concentración de las grandes empresas transalpinasmadrid. Campofrío pone su punto de mira en el mercado italiano. El gigante cárnico, que compró hace tres meses la marca transalpina Fiorucci por 45 millones de euros, quiere aprovechar esta punta de lanza para "ser protagonista de excepción con la posible futura consolidación del sector cárnico italiano todavía pendiente", según explicaba ayer Pedro Ballvé, presidente de la compañía, durante su discurso de la junta general de accionistas de Campofrío. El primer ejecutivo de la empresa justifica este escenario por la estructura familiar del sector en Italia, donde el cambio generacional será proclive a las alianzas y fusiones. Tras terminar el acto, y en declaraciones a elEconomista, Ballvé reconoció el interés de Campofrío por Italia, aunque no se atrevió a fijar un calendario. "Puede ser en breve o dentro de nueve años, pero lo cierto es que Italia está viviendo ahora la misma transformación que otros mercados como España, Francia y Portugal ya han experimentado", añadió. Para ello, la compañía cuenta con liquidez: exactamente dispone de una caja de 169 millones de euros al cierre del pasado ejercicio. De hecho, la política del grupo es autofinanciarse para no depender de los préstamos bancarios. Aún así, cuenta con una deuda financiera de 356 millones de euros. Campofrío considera la presencia en Italia doblemente importante porque la marca Fiorucci "representa una cabeza de puente para llevar un portfolio único de productos europeos al mercado más dinámico del mundo (en referencia a EEUU)". Ballvé también se refirió ante los accionistas al intento de opa de exclusión que protagonizó él mismo y Smithfield, que controla el 37 por ciento del grupo. Tras retirarse este segundo, la operación se truncó. El presidente de Campofrío señalaba ayer que su compromiso en la compañía "sigue siendo igual de profundo y está totalmente alineado con lo que esperamos para Campofrío Food Group: un futuro de crecimiento y de consolidación". Opa de exclusión descartada Después del acto, Ballvé añadió a este periódico que descartaba totalmente "cualquier nuevo intento de proponer una opa de exclusión", por lo menos en su caso. En cuanto a Smithfield ya explicaron en su momento que echaban marcha atrás en este intento por la situación económica y por la caída del valor de las acciones de la propia Smithfield. La compañía también alertó del peligro de la subida de precios de la materia prima, por culpa de la que han perdido margen de beneficio en la primera mitad del año. Campofrío espera recuperar estos márgenes en el cuarto trimestre, puesto que en mercados en los que opera está planteando una segunda modificación de precios desde julio, momento en el que el precio de las materias primas habrá tocado techo.