bilbao. El Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) difundió ayer un informe sobre la fiscalización del Museo Marítimo Vasco desde su fundación en 2003 hasta el cierre de 2009 en que las conclusiones son demoledoras. El museo lo gestiona una fundación privada, pero cuyos patronos y principales financiadores son públicos. El organismo fiscalizador señala cómo inicialmente las obras del museo se presupuestaron en 4,244 millones, pero su realización se elevó hasta los 5,821 millones, a los que se suma la adecuación de los muelles por valor de 1,292 millones. A continuación se sucede una larga lista de incumplimientos legales o irregularidades en materia de subvenciones y su contabilización, selección de personal, adjudicaciones de contratos, así como en el registro de patronos. Al estar el museo en pérdidas desde su inauguración, el TVCP recomienda aportar más fondos y buscar otras fórmulas de gestión.