La 'teleco' creará seis grandes 'data center' en todo el mundoAlcanza el 30% tras pagar 400 millones de euros al Estado helenomadrid. Telefónica cuenta las horas para comprar Acens, compañía española controlada por el fondo de capital riesgo Nazca y que desarrolla su actividad en el negocio de los data center y alojamientos de servicios online. Diversas fuentes próximas a las negociaciones aseguraron ayer a este periódico que la operación rondará los 75 millones de euros, un precio inferior a las valoraciones realizadas hace más de un año entre los propietarios de la firma de servicios de alojamiento y el grupo de telecomunicaciones. De esa forma, Telefónica da un paso de gigante en el universo del cloud computing (servicios a través de la infraestructura de Internet) con una compañía líder en su sector, con presencia en Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao. Fuentes de ambas compañías declinaron realizar comentarios sobre una operación que al cierre de esta edición se encontraba prácticamente encarrillada, y sólo pendiente de los últimos trámites legales. Proyecto de escala global Con la ayuda de Acens, Telefónica dispondrá de la mejor experiencia para poner el marcha la concentración de su centenar de data centers distribuidos por todo el mundo en sólo seis grandes centros, dos de ellos situados en Europa (Alcalá de Henares y Praga) y los cuatro restantes en Latinoamérica, con presencia asegurada en Brasil y México. En el proceso de integración de recursos, el grupo que preside César Alierta prevé invertir cerca de 1.500 millones de euros. Acens ha adquirido en los últimos años cuatro compañías que eran líderes en sus respectivos segmentos de actividad, como es el caso de Hostalia, Veloxia, Ferca y Centrodedatos.Barcelona. Simon vuelve a recurrir por segunda vez en lo que va de año a un ajuste de plantilla para hacer frente a la caída de pedidos. Si hace unos meses la compañía esgrimía el parón inmobiliario para cerrar su planta de material eléctrico de Barcelona, ahora justifica el despido de 45 personas en su filial Simon Lighting por el desplome de la demanda en la administración. Simon Lighting está especializada en la fabricación y venta de productos para el alumbrado público y cuenta con dos factorías en las localidades barcelonesas de San Adrià y Canovellas. Un portavoz de la empresa aseguró que no se cerrará ninguno de los dos centros de producción, aunque la medida afecta a un 30 por ciento de los 150 trabajadores de ambas instalaciones. Las mismas fuentes indicaron que su actividad se ha visto afectada por una "drástica reducción de compra" por parte de los organismos públicos y que se ha "visto obligada a adaptar sus recursos humanos y productivos" como respuesta a "las restricciones en nuevos proyectos e inversiones que están experimentando los entes públicos, en algunos casos en niveles superiores al 70 por ciento". La compañía no quiso comentar las condiciones que va a plantear a los trabajadores para ejecutar los despidos. En el caso de la planta de Barcelona, la compañía ofreció recolocaciones a los 64 trabajadores afectados en otras fábricas del grupo catalán.