El grupo alemán reduce un 34% su beneficio, hasta 1.315 millones por menos extraordinariosMADRID. Día de números para E.ON. Tras su reciente junta general de accionistas, donde anunció la intención de tomar medidas legales por el cierre de las centrales nucleares en Alemania, ahora la compañía ha reconocido una reducción de sus previsiones anuales para el conjunto del ejercicio como consecuencia de la paralización de sus dos plantas atómicas en este país, tras su replantamiento en política energética por el accidente de Fukushima, en Japón. De este modo, la compañía alemana prevé que su resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado se situará al cierre del ejercicio entre 10.700 y 11.400 millones de euros, mientras que el beneficio neto ajustado del grupo oscilará entre 3.000 y 3.700 millones de euros, lo que representa un ajuste aproximado de 500 millones respecto a las estimaciones originales. Asimismo, E.On precisó que estas estimaciones "se basan en la hipótesis de que sus centrales nucleares puedan volver a estar operativas después de la moratoria", aunque calculó que esta paralización reducirá sus beneficios en unos 250 millones de euros. Por otro lado, la compañía ha solventado de la mejor manera posible la caída de la demanda provacada por la recesión económica. Por ello, ha repetido beneficio en el primer trimestre con 2.275 millones. No obstante, el resultado neto ajustado cayó un 34 por ciento, hasta los 1.315 millones al registrar menos extraordinarios en este periodo. Los principales impulsores positivos de los beneficios fueron unos beneficios considerablemente mayores en la producción de gas, las energías renovables y Rusia, junto con efectos positivos de PerformtoWin, el programa de mejora de la eficiencia de E.ON. Estos resultados son los primeros con la nueva segmentación, que refleja el cambio organizativo que la compañía anunció el pasado otoño.La cifra de negocio de E.ON se situó en 27.846 millones de euros, un 8,4 por ciento más, con un crecimiento del 12 por ciento de las ventas de energía eléctrica y un aumento del 13 por ciento en las ventas de gas.