Todas las patronales conceden prioridad a la recuperación de las ventas de automóvilesmadrid. El Consejo de Ministros aprobó ayer un programa de incentivos para la adquisición de vehículos eléctricos, que contempla una subvención máxima de 6.000 euros por cada automóvil, con lo que el presupuesto total para las ayudas suma 72 millones de euros. La medida fue acogida con frialdad por el sector de automoción, mucho más preocupado por salvar la cara en una crisis que persiste desde 2008. El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, detalló que el plan contempla ayudas para la compra de todo tipo de vehículos eléctricos, y tiene por objeto estimular la demanda. También explicó que el Gobierno ha planteado un nuevo sistema de tarifas para la recarga de estos vehículos, con el fin de que la energía eléctrica sea más barata por la noche. De esta forma, el Gobierno subvencionará hasta un 25 por ciento del precio antes de impuestos del coche, con un máximo de 6.000 euros por unidad, incluyendo las baterías para los usuarios y las flotas privadas. Asimismo, también se incentivará el 25 por ciento del precio bruto de adquisición de otros vehículos como autobuses, autocares o furgonetas con un máximo de 15.000 ó 30.000 euros, dependiendo del tipo y la autonomía. La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles (Anfac) considera que las ayudas a la compra de coches eléctricos aprobadas constituyen un "primer paso" para su introducción progresiva, pero reconoce que actualmente los vehículos de este tipo no son atractivos. Así lo ha asegurado el director general de Anfac, Luis Valero, quien vaticinó que el coche eléctrico se generalizará en el ámbito urbano a partir de 2020, pero admitió que "hasta que el producto no tenga las prestaciones de un coche tradicional, no será atractivo", informa Ep. "Es un primer paso que ayuda a la entrada de este tipo de vehículos en el mercado, pero va a tardar un poco todavía", insistió. El presidente de la Asociación de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam), Juan Antonio Sánchez Torres, respaldó el plan, pero lamentó que los recursos no se destinen a reflotar la demanda, ante la fuerte caída que sufre el mercado automovilístico, que está provocando cierres de empresas y la destrucción de empleo. En la misma línea se manifestó la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto), que ha calificado de "positivas" las medidas, aunque consideró que lo prioritario es cambiar la dinámica de caídas de ventas que está sufriendo el mercado automovilístico. Según la empresa de renting Arval, el 68 por ciento de las pequeñas y medianas empresas españolas rechaza incorporar un vehículo eléctrico a su flota por el elevado precio de este tipo de automóviles. La filial del grupo BNP Paribas explicó que las subvenciones "difícilmente estimularán" la demanda de este tipo de vehículos hasta alcanzar los objetivos de matriculaciones previstos.