Brufau: "La puesta en valor de YPF contribuye a un mayor valoración de Repsol"Brufau: "La puesta en valor de YPF contribuye a un mayor valoración de Repsol"Repsol financia el 50% del crédito al grupo argentino que pagará 1.500 millonesmadrid. Repsol YPF ha cerrado la venta de un 10 por ciento de YPF al Grupo Petersen por 1.300 millones de dólares, tal y como adelantó elEconomista el pasado 7 de abril. Enrique Eskenazi viajó ayer a Madrid para cerrar la operación aunque la firma definitiva se mantuvo en vilo durante toda la jornada por las dificultades mantenidas con las entidades financieras que participan en el crédito sindicado. El grupo Petersen negociaba ayer algunos puntos de la financiación porque Repsol hará las veces de financiador de casi un 50 por ciento del préstamo a través del mecanismo conocido como vendor's loan, muy común en estas operaciones para agilizar las ventas. El principio de acuerdo sobre los términos de la transacción contempla un préstamo a cinco años, donde las garantías del mismo sean las propias acciones de la petrolera. Sin embargo, uno de los puntos que ha tenido una mayor complejidad ha sido los tipos de interés. La familia argentina contará con un crédito cercano a los 700 millones de dólares. El resto lo desembolsarán con una aportación en efectivo y con la financiación de la propia petrolera, como ya hiciera en su desembarco inicial. El precio fijado de 1.300 millones de dólares es considerado como muy atractivo para el grupo argentino a tenor de las cifras ingresadas en las ventas realizadas durante las últimas semanas por la petrolera, que rondan los 41 euros por cada título de YPF, frente a los 38 euros que paga ahora el grupo Petersen. Reunión en Buenos Aires Brufau y Eskenazi ya se reunieron la semana pasada para dar el carpetazo definitivo a la operación. De hecho, ambos quisieron esperar a que se celebrasen las juntas de accionistas tanto de Repsol como de la filial para firmar la operación que estaba prácticamente cerrada desde principios de este mes, tal y como indicó elEconomista. El Grupo Petersen tenía hasta finales de año para cerrar la compra, pero su intención era ejecutar la opción de compra lo antes posible. Prueba de ello ha sido esta visita a Madrid que ha servido para culminar la operación. Esta opción de compra valoró a YPF en 15.000 millones de dólares en el momento del acuerdo y debía ejecutarse antes de abril de 2012. Sin embargo, Eskenazi no ha querido agotar este plazo después de ver cómo la petrolera le ha dado paso en el consejo, así como gran parte de la gestión de la compañía. El presidente de Repsol, Antonio Brufau, aseguró ayer que "es una operación muy positiva para ambas compañías. La puesta en valor de YPF contribuye a la mayor valoración de Repsol, y culminará con la incorporación de accionistas argentinos, que aportarán estabilidad y seguridad a los activos de la compañía". Sin dividendo extraordinario Repsol descarta el pago de un dividendo extraordinario con los ingresos por la venta de YPF y pretende aprovecharlos para reforzarse en los países de la OCDE. La petrolera podría estar interesada en participar en algunos de los proyectos de desinversión de activos petroleros que se están llevando a cabo en estos momentos por algunas de las grandes compañías del sector. Repsol ha acelerado su proceso de salida de YPF desde noviembre con la colocación de un 15 por ciento y mantiene su intención de controlar un 51 por ciento de esta filial. De esta manera, a la compañía aún le queda pendiente la colocación de un 7,23 por ciento, algo que puede hacer cómodamente a través de ventas en el mercado o mediante una salida a bolsa en el Merval, al que podría destinar alrededor de un 5 por ciento, puesto que tiene otra parte de esta participación comprometida. La petrolera lleva ya varios años en este proceso de reducir su presencia en YPF. En un principio, se planteó una salida a bolsa, la entrada de un inversor industrial o bien las dos cosas de forma complementaria. Y finalmente ha triunfado la última opción elegida por Repsol. Pero en medio del camino se cruzó la recesión económica y paralizó en varias ocasiones las intenciones del grupo. Ahora todo marcha sobre ruedas y este ejercicio está siendo clave para finalizar el proceso. Para la compañía otros mercados son más prioritarios que Argentina, sobre todo por el potencial que están demostrando países como Brasil, donde el grupo prevé invertir más de 10.000 millones de dólares en actividades de exploración en la próxima década. Gracias a la alianza con Sinopec, la compañía podría abarcar este volumen inversor. No obstante, en Argentina, hay en marcha un programa de optimización y un programa de reservas que ha fijado el foco en recursos no convencionales.madrid. Repsol YPF ha cerrado la venta de un 10 por ciento de YPF al Grupo Petersen por 1.300 millones de dólares, tal y como adelantó elEconomista el pasado 7 de abril. Enrique Eskenazi viajó ayer a Madrid para cerrar la operación aunque la firma definitiva se mantuvo en vilo durante toda la jornada por las dificultades mantenidas con las entidades financieras que participan en el crédito sindicado. El grupo Petersen negociaba ayer algunos puntos de la financiación porque Repsol hará las veces de financiador de casi un 50 por ciento del préstamo a través del mecanismo conocido como vendor's loan, muy común en estas operaciones para agilizar las ventas. El principio de acuerdo sobre los términos de la transacción contempla un préstamo a cinco años, donde las garantías del mismo sean las propias acciones de la petrolera. Sin embargo, uno de los puntos que ha tenido una mayor complejidad ha sido los tipos de interés. La familia argentina contará con un crédito cercano a los 700 millones de dólares. El resto lo desembolsarán con una aportación en efectivo y con la financiación de la propia petrolera, como ya hiciera en su desembarco inicial. El precio fijado de 1.300 millones de dólares es considerado como muy atractivo para el grupo argentino a tenor de las cifras ingresadas en las ventas realizadas durante las últimas semanas por la petrolera, que rondan los 41 euros por cada título de YPF, frente a los 38 euros que paga ahora el grupo Petersen. Reunión en Buenos Aires Brufau y Eskenazi ya se reunieron la semana pasada para dar el carpetazo definitivo a la operación. De hecho, ambos quisieron esperar a que se celebrasen las juntas de accionistas tanto de Repsol como de la filial para firmar la operación que estaba prácticamente cerrada desde principios de este mes, tal y como indicó elEconomista. El Grupo Petersen tenía hasta finales de año para cerrar la compra, pero su intención era ejecutar la opción de compra lo antes posible. Prueba de ello ha sido esta visita a Madrid que ha servido para culminar la operación. Esta opción de compra valoró a YPF en 15.000 millones de dólares en el momento del acuerdo y debía ejecutarse antes de abril de 2012. Sin embargo, Eskenazi no ha querido agotar este plazo después de ver cómo la petrolera le ha dado paso en el consejo, así como gran parte de la gestión de la compañía. El presidente de Repsol, Antonio Brufau, aseguró ayer que "es una operación muy positiva para ambas compañías. La puesta en valor de YPF contribuye a la mayor valoración de Repsol, y culminará con la incorporación de accionistas argentinos, que aportarán estabilidad y seguridad a los activos de la compañía". Sin dividendo extraordinario Repsol descarta el pago de un dividendo extraordinario con los ingresos por la venta de YPF y pretende aprovecharlos para reforzarse en los países de la OCDE. La petrolera podría estar interesada en participar en algunos de los proyectos de desinversión de activos petroleros que se están llevando a cabo en estos momentos por algunas de las grandes compañías del sector. Repsol ha acelerado su proceso de salida de YPF desde noviembre con la colocación de un 15 por ciento y mantiene su intención de controlar un 51 por ciento de esta filial. De esta manera, al grupo aún le queda pendiente la colocación de un 7,23 por ciento, algo que puede hacer cómodamente a través de ventas en el mercado o mediante una salida a bolsa en el Merval, al que podría destinar alrededor de un 5 por ciento, puesto que tiene otra parte de esta participación comprometida. La petrolera lleva ya varios años en este proceso de reducir su presencia en YPF. En un principio, se planteó una salida a bolsa, la entrada de un inversor industrial o bien las dos cosas de forma complementaria. Y finalmente ha triunfado la última opción elegida por Repsol. Pero en medio del camino se cruzó la recesión económica y paralizó en varias ocasiones las intenciones del grupo. Ahora todo marcha sobre ruedas y este ejercicio está siendo clave para finalizar el proceso. Para la compañía otros mercados son más prioritarios que Argentina, sobre todo por el potencial que están demostrando países como Brasil, donde el grupo prevé invertir más de 10.000 millones de dólares en actividades de exploración en la próxima década. Gracias a la alianza con Sinopec, la compañía podrá abarcar este volumen inversor. No obstante, en Argentina, hay en marcha un programa de optimización y un programa de reservas que ha fijado el foco en recursos no convencionales.madrid. Enrique Eskenazi, presidente del grupo Petersen, ha viajado en secreto a Madrid para cerrar la compra de un 10 por ciento adicional de YPF a Repsol. Según fuentes consultadas por elEconomista, este ejecutivo se reunió ayer con el presidente de la petrolera, Antonio Brufau, y logró cerrar un acuerdo definitivo después de haberse visto la semana pasada en Argentina en la junta de YPF, pero finalmente se ha retrasado la firma por la falta de acuerdo con la banca hasta casi las nueve de la noche de ayer. Las partes están pendientes de acordar algunos pequeños flecos de esta transacción, que se hará de un forma muy similar a la compra del primer paquete del 15 por ciento de YPF por parte de Eskenazi y que supuso el primer paso de la reducción de peso de Repsol en esta filial hace ya tres años. El Grupo Petersen tenía hasta finales de año para cerrar la compra pero tal y como adelantó elEconomista su intención era cerrar la operación en breve. Prueba de ello es esta visita a Madrid que ha servido para culminar la operación en la que aseguran que hay un proceso organizado. Financiación El grupo Petersen negociaba ayer algunos puntos de la financiación porque Repsol hará las veces de financiador de casi un 50 por ciento del préstamo a través del mecanismo conocido como vendor's loan, muy común en estas operaciones para agilizar las ventas. El principio de acuerdo sobre los términos de la transacción contempla un préstamo a cinco años, donde las garantías del mismo sean las propias acciones de la petrolera. Sin embargo, uno de los puntos a negociar en estos momentos son los tipos de interés porque dependerán del momento en que se firme la operación. Esta opción de compra se valoró en 15.000 millones de dólares en el momento del acuerdo y debía ejecutar la compra antes de abril de 2012. Sin embargo, Eskenazi no quiere agotar este plazo después de ver cómo la petrolera le ha correspondido dándole paso en el consejo. Repsol ha acelerado su proceso de salida de YPF desde noviembre con la colocación de un 15 por ciento y mantiene su intención de controlar un 51 por ciento de esta filial. De esta manera, a la compañía aún le queda pendiente la colocación de un 5,6 por ciento, algo que puede hacer cómodamente a través de ventas en el mercado o mediante una salida a bolsa en el Merval. Cotizar en Latibex La petrolera se prepara para poder cotizar acciones de YPF en el Latibex a fin de darle mayor visibilidad.