El grupo, que ahora se llama Mediaset España, reconoce que el sistema puede no ser el más aptomadrid. Las dificultades por las que atraviesa la nueva Telecinco, rebautizada como Mediaset España, para sacar el máximo rendimiento a la integración de Cuatro, ha llevado a la cadena a replantearse su modelo de explotación publicitaria. "Cualquier cambio en el modelo de oferta es posible ya que va en función de la demanda", dijo Guiseppe Tringali, consejero delegado de publicidad, durante la junta de accionistas que se celebró ayer en el plató de La Noria y donde se aprobó el pago de un dividendo de 0,24 euros y de otro extraordinario de 0,10 euros con cargo a reservas. El sistema modular implantado por la cadena que preside Alejandro Echevarria hace dos años es susceptible de cambios ya que podría no ser el más ventajoso dado el nuevo escenario del grupo. Fuentes del mercado apuntan que la cuota de mercado de Telecinco y Cuatro en 2011 ha sido del 44,7 por ciento muy lejos de 47 por ciento previsto. Aunque se barajan varias opciones, ("no es lo mismo gestionar la publicidad de tres cadenas que de siete", aseguran desde Telecinco), la operadora descarta por completo adoptar el modelo de pauta única de Antena 3. Según explican en el sector, el sistema de la cadena de Fuencarral no respeta al anunciante ni al telespectador, dos condiciones imprecindibles para establecer cualquier modelo, explicó Tringali. "Perseguir nuestros objetivos de ingresos a lo largo del año será menos complicado en el segundo semestre", dijo Tringali que prevé que la inversión por publicidad crezca en el mercado un 2 por ciento frente al aumento del 1 por ciento del primer trimestre.