El sector presenta un recurso para poder repercutir al consumidor este costemadrid. El revuelo formado en el sector eléctrico porque las eléctricas pretenden cobrar una pequeña parte (los derechos de enganche) de los nuevos contadores inteligentes se ha saldado con la unión de las cuatro grandes compañías de este negocio frente a las negativas del Ministerio de Industria y de la Comisión Nacional de la Energía. Fuentes cercanas a estos grupos explicaron a elEconomista, que han recurrido a través de la patronal Unesa la prohibición de cobro con un recurso de alzada en la cartera que dirige Miguel Sebastián. Endesa, Iberdrola y Gas Natural Fenosa y HC Energía se quejan de que ya deben costear por más de 2.000 millones el desarrollo del sistema informático necesario para lograr la telegestión, así como los nuevos aparatos, debido a una orden ministerial que fija que, desde enero de 2008 y en un periodo de cinco años, se modificarán más de 20 millones de aparatos. El problema se desató a raíz del envío por parte de Endesa de unas cartas a sus clientes de Aragón, Canarias, Andalucía y Baleares, principalmente, para informar de que se iba a proceder a un cobro de 9,04 euros por los derechos de enganche ante la obligatoriedad de ir cambiando los contadores, según está establecido por Ley. Fuentes del sector aseguran que la confusión se ha producido por un resquicio legal que quedaba sin especificar en la nueva norma para afrontar el proceso de cambios de contadores. Por ello, las compañías defienden que esta laguna sea abonada por los consumidores en tanto que a largo plazo son quienes van a disfrutar de las ventajas de estos nuevos aparatos, como la discriminación horaria para poder hacer un consumo más razonable y eficiente de la electricidad. Cabe destacar que los edificios de nueva construcción ya tienen instalados los nuevos contadores y las compañías han ido afrontando las modificaciones de estos aparatos por sus años de antigüedad y por posibles averías. En España, las compañías han ido avanzando en estos cambios con ambiciosos planes de modificación de contadores. Iberdrola y Endesa son quienes se han mostrado más activas en este campo, mientras que Gas Natural Fenosa prevé presentar en breve un plan de despliegue de contadores. La compañía que preside Ignacio Sánchez Galán ya ha comenzado en Castellón la instalación masiva de los dispositivos inteligentes. Previamente a esta implantación, Iberdrola ya ha instalado desde el 2007 un millón de equipos que permiten medir la electricidad por periodos y tienen la capacidad de conectarse a un sistema de telegestión. Según el grupo, los nuevos contadores también favorecen la calidad del suministro, al poder realizar multitud de maniobras en tiempo real y a distancia. Por su parte, Endesa cuenta con un plan de telegestión que recoge la instalación de los nuevos dispositivos en los domicilios de los 13 millones de clientes domésticos de la compañía en España en menos de seis años. Esta estrategia supone una inversión de más de 1.600 millones de euros hasta 2015, así como la creación de 2.000 empleos directos. Las redes en otros países Las principales potencias mundiales han comenzado una carrera para liderar las redes inteligentes. Italia, por ejemplo, es un país pionero en este campo. En el inició hace más de una década la instalación de contadores para poder controlar los robos de corriente eléctrica y para cortar, de manera remota, el suministro a los clientes morosos. Por su parte, Suecia, gracias a la obligatoriedad impuesta por el Gobierno, se ha convertido en el primer país en el que cada cliente tiene un contador inteligente. En Estados Unidos se ha aprobado incentivos para la instalación de estos dispositivos y China tiene ya un plan de cinco años para la construcción del núcleo de lo que será su red eléctrica inteligente. Por su parte, Reino Unido se lo ha tomado con calma, ya que planea completar un despliegue de estos dispositivos para el 2020.