El ex director del Consejo de Administración podría ser ahora investigadoBerlín. El culebrón de corrupción de Siemens podría salpicar finalmente a quienes dirigieron la empresa durante la última década. Hasta ahora, los más altos cargos habían conseguido mantenerse a salvo de la polémica, aunque eso sí, saltando a tiempo del barco cuando empezó a perder agua. Es el caso de Heinrich von Pierer, que presidió el gigante entre 1992 y 2005. En abril, von Pierer abandonó voluntariamente su cargo, pero negó que su decisión tuviera que ver con los sobornos. El ex directivo niega haber sabido algo sobre las cajas negras de las que salían los cheques destinados a facilitar la concesión de contratos a la empresa. El actual Consejo de Administración comienza a dudar de su palabra. Según medios alemanes, en este órgano de control interno se han elevado voces que piden que se investigue el papel de von Pierer en este asunto. Ante todo quieren saber si la anterior directiva actuó con responsabilidad en 2001, cuando Siemens comenzó a cotizar en Wall Street e hizo lo posible para eliminar la existencia de cajas negras.Los negocios sucios podrían costarle a Siemens un serio disgusto económico. A los 1.600 millones de euros que según medios alemanes habrían ido a parar a la cuenta de pagos dudosos, podría sumarse también una multa del organismo de control bursátil estadounidense, la SEC, que suele imponer sanciones por una cantidad muy superior a la sobornada. Según el diario Süddeutsche Zeitung, el Consejo de Administración de Siemens teme que incluso sea necesario vender alguna división del grupo para hacer frente a una elevada multa.