El Museo Thyssen centra la muestra en sus dos maestros: Durero y CranachEl visitante del museo Thyssen se verá sumergido desde el 9 de octubre en la Alemania de la época que abarca desde finales del siglo XV a mediados del siglo XVI. Aunque el título de la muestra, Durero y Cranach. Arte y Humanismo en la Alemania del Renacimiento hace alusión a dos de sus más grandes artistas, Alberto Durero (1471-1528) y Lucas Cranach el Viejo (1472-1553), están también representados Hans Baldung Grien (1485-1545), Albrecht Altdorfer (1480-1538) y otros destacados pintores que siguieron la estela de los dos maestros. Uno de los aciertos de la exposición es ofrecer una visión global, tanto en la diversidad de las manifestaciones artísticas, como en el papel que jugó el arte en los cambios políticos y religiosos que tuvieron lugar en esa época convulsa. Así, se exhiben pinturas y dibujos, grabados y estampas -que se hacen eco de la importancia que supuso la invención de la imprenta para la difusión del conocimiento-, diseños, objetos decorativos, y hasta armaduras y otros útiles de la guerra y la caza. Todo ello da una idea no sólo del arte sino también de la sociedad, la política y la religión de esos años en los que se está produciendo un profundo cambio promovido por la Reforma religiosa y el nacimiento de los grandes imperios transnacionales.La muestra destaca la contradictoria coexistencia de opciones artísticas y culturales que nos ofrecen, por un lado, una imagen medida y controlada de la realidad, que tendría su mejor referente en algunos aspectos de la obra de Alberto Durero, frente al gusto de determinados artistas como Altdolfer, Grünewald, Cranach o incluso el mismo Durero en series como El Apocalipsis, con una representación del mundo como drama y conflicto.La exposición pone de manifiesto, también, dos funciones muy distintas de la obra de arte. Mientras que en la primera parte se hace hincapié en la función estética, en la segunda se verá cómo la imagen puede adquirir aspectos más prácticos y funcionales.