El Tesoro ha emitido 32.800 millones en enero y febrero de 2011madrid. El Tesoro Público saldó ayer con un sabor agridulce la última emisión de deuda de febrero. La cara provino de las letras a seis meses, que salieron a un interés inferior al de enero. En concreto, se subastaron con un rendimiento medio del 1,588 por ciento, cuando hace un mes se colocaron al 1,80 por ciento. La cruz la pusieron los títulos a tres meses, cuya rentabilidad media se encareció del 0,98 por ciento de enero al 1,10 por ciento. También dejó una sensación mixta la financiación lograda. El Tesoro se había propuesto captar entre 2.500 y 3.500 millones de euros y, aunque consiguió esta meta, se quedó en la parte baja de la horquilla, puesto que obtuvo 2.870,5 millones, repartidos entre los 1.859,5 millones de letras a tres meses y los 1.011 millones de los títulos a medio año. En cuanto a la demanda, volvió a ser abundante. En total, alcanzó los 11.790,6 millones de euros, en línea con las peticiones ya registradas en la primera emisión de este tipo realizada en 2011. Parte de las dificultades con las que se encontró el organismo emisor procedió de las tensiones que se vuelven a respirar en la deuda pública europea. Ayer, la prima de riesgo de España, medida por la diferencia entre la rentabilidad de los bonos españoles y alemanes a 10 años, se amplió de los 217 a los 221 puntos básicos -ó 2,21 puntos porcentuales-, la mayor brecha desde finales de enero. También repuntó el seguro contra el impago (CDS) de la deuda española, que pasó de los 253 a los 257 puntos básicos. Ritmo adecuado Con la operación de ayer, el Tesoro cumplió con el calendario de emisiones previsto para los dos primeros meses del año. Hasta el mo- mento, ha emitido 32.800 millones en deuda a corto, medio y largo plazo, una cifra que concuerda con el ritmo necesario para captar los 192.000 millones previstos para el conjunto del año. La próxima subasta, de bonos a cinco años, tendrá lugar el 3 de marzo.