Economía cederá para tener un apoyo mínimo al decreto ley de recapitalizaciónmadrid. El Ministerio de Economía se encuentra atrapado en un dilema: por un lado, quiere transmitir un mensaje de firmeza a los mercados con el decreto ley sobre recapitalización de entidades financieras; por otro, necesita encontrar apoyos para sacar adelante el proyecto en el Congreso y justificar su presentación con un amplio consenso político y sectorial. Pero por ahora ha hecho agua en los dos frentes, por lo que se plantea ceder en algunas de sus premisas. La más importante, y donde se centran los mayores esfuerzos tanto de CiU como de la Confederación de Cajas (Ceca) es en arrancar el compromiso de Economía que, aunque se mantenga el mes de septiembre como fecha tope para presentar los planes de recapitalización y la conversión en bancos, se dé un plazo adicional para posibilitar sacar a bolsa de una forma escalonada y ordenada los bancos de las cajas. Ese plazo podría suponer alargar todo el proceso hasta finales del primer semestre del próximo año, según aseguran fuentes financieras. Las quejas al departamento de Elena Salgado se justifican por el hecho de que si todas las cajas y SIP que no cumplen con el requerimiento de capital del 8 por ciento tuvieran que reconvertirse en bancos y salir a bolsa a la vez y en tan poco espacio de tiempo, se verían obligadas a malvender sus acciones y también a exponerse a que la cuota de inversores institucionales que deben reservar fueran colocadas a precios de ganga y a compradores no deseados, como fondos especulativos. Según aseguran diversas fuentes, es en este punto donde Economía se muestra más receptiva, si bien se mantiene firme en mantener el 10 por ciento de capital principal para aquellas que ni coticen ni tengan inversores privados como socios. Pero lo que también está en duda es si tanto la composición del ratio como la contabilización de sus componentes descritos en el borrador se modificarán para bajar el listón. Salgado, por ahora, sólo trabaja con la hipótesis de que el decreto ley sea aprobado por el Consejo de Ministros el próximo viernes y que lo sea con la garantía de que posteriormente será convalidado. Tanto el PP, el más crítico, como CiU exigen cambios para adherirse al proyecto, mientras PNV lo apoyará si no se entorpece a una fusión de las cajas vascas.s Más información relacionada con este tema en www.eleconomista.es