El SIP no incluye las participadas, mientras la caja catalana cuenta con todos sus activosMADRID. El valor contable de Banco Financiero y de Ahorros se sitúa en 10.660 millones de euros, según afirmó ayer su presidente Rodrigo Rato. Esta cifra es prácticamente la mitad de lo que La Caixa valora lo que será CaixaBank, 20.600 milones, fruto de añadir a Criteria la actividad bancaria y sus participadas internacionales financieras, y de permanecer en esta filial el 5 por ciento de Telefónica y el 13 por ciento de Repsol. A esta valoración hay que añadirle otros 10.100 millones de euros de la filial de nueva creación, que no cotizará, y que agrupará el resto de su cartera industrial, Servihabitat y la participación en Metrovacesa y Colonial. Sin embargo, las cifras pueden ser engañosas, ya que Caja Madrid, al poner valor a su patrimonio, no incluye en él el valor de sus participaciones, que asciende a otros 5.600 millones de euros. Así, si sólo se compara el negocio bancario la valoración entre el SIP de Caja Madrid y La Caixa es muy parecido, ya que la entidad catalana, según los datos presentados el pasado viernes, sitúa en 9.500 millones la valoración de su actividad bancaria nacional. Por tamaño de balance, sin embargo, es Banco Financiero y de Ahorros el que se coloca en primer lugar, ya que gestiona alrededor de 340.000 millones de activos, mientras La Caixa tiene alrededor de 280.000 millones. Trato discriminatorio Rato se lamentó ayer del trato discriminatorio entre entidades. Así, afirmó que las reglas del juego deben ser iguales para todos, y que alterar la competencia es algo perjudicial para el conjunto del sistema y de la economía en general. Salgado ya adelantó durante la semana pasada que exigirá entre un 9 y un 10 por ciento de core capital a las cajas que no coticen. El sector además, como publicó elEconomista, está muy molesto y así tiene previsto comunicarlo a Economía, porque el plan del Gobierno no alcanza a loss bancos extranjeros que actúan en España a través de una sucursal, por lo que no están obligados a tener una recapitalización mínima del 8 por ciento, ya que se guían por las directrices del supervisor de su país de origen. El banco más destacado de este grupo es ING Direct.