Galán invita a Caja Madrid a entrar en la empresa tras su marcha de Endesaglasgow. A pesar de que el próximo 31 de octubre se había perfilado como el "día D" para la salida a bolsa de Iberdrola Renovables, la cosa ha cambiado. Habrá que esperar hasta el mes de diciembre para ver a la filial verde de la eléctrica cotizando en el parqué español. Será entonces cuando, según el presidente Ignacio Sánchez Galán, estén dados todos los pasos necesarios para afrontar la Oferta Pública de Suscripción (OPS). Según sus palabras: "En el mes de octubre presentaremos nuestro plan estratégico para 2008-2010, y será en el mes de noviembre cuando solucionemos todo el papeleo necesario para la salida a Bolsa. Esperamos estar cotizando a lo largo de diciembre", afirmaba ayer Galán.Según los cálculos de la eléctrica, su nueva filial cotizada será el primer productor de energía eólica del mundo, con más de 40.200 MW en cartera y tendrá un valor de entre 20.000 y 25.000 millones de euros, más que Unión Fenosa, Gas Natural y próximo al del gigante Inditex. Otro punto importante a barajar por los futuros inversores de Iberdrola Renovables serán sus activos, en los que se integrarán todos los negocios de renovables que tiene la compañía: eólica, minihidráulica, solar y fotovoltaica, además de las inversiones de PPM -filial estadounidense de Scottish Power- en gas. Pero para eso, habrá que ir por pasos; y uno de los principales que tendrán que dar desde los pasillos de la eléctrica será la ampliación de capital -la sexta en este año- de entre 4.000 y 5.000 millones de euros para afrontar la OPS. En lo que se refiere a los futuros accionistas de Iberdrola Renovables, Sánchez Galán explicaba ayer que no tiene la mirada puesta en grandes inversores, sino más bien en participaciones más pequeñas: "Si por mí fuera, la mayoría de nuestro accionariado sería minorista. El objetivo sería tener más de 300.000 minoristas, que son los que ahora mismo tiene Iberdrola. Queremos que un señor que tenga en su pueblo un parque eólico, se pueda sentir parte de él".Antes de que esto sea posible, a la compañía todavía le queda un asunto pendiente: la presentación de su plan estratégico a finales de octubre. Galán afirma que los próximos dos años estarán centrados en la consolidación y no en las compras, aunque no descartan nuevas inversiones en caso de que hubiese una gran oferta. El objetivo final, multiplicar el beneficio bruto de explotación (Ebitda) por dos en tres años, algo a lo que contribuirá Scottish Power. Según los cálculos de la eléctrica, la escocesa representará a finales de año entre un 25 y un 30 por ciento de su Ebitda. Hay que recordar además que, en los primeros 70 días de su integración con Iberdrola -previo pago de 17.400 millones de euros- Scottish Power aportó a la compañía 395 millones.La eléctrica confirmó ayer además su interés por participar en los proyectos de interconexión entre Escocia e Inglaterra, tal y como adelantó elEconomista, y que supondrían inversiones por alrededor de 1.300 Interés de Caja MadridPor otro lado, según adelantaba ayer el propio presidente de la eléctrica, Caja Madrid podría estar interesada en incorporarse al accionariado de Iberdrola. Las dos partes han mantenido ya muchas conversaciones sobre la posible entrada en la eléctrica, aunque por ahora, "no hay nada sobre el papel". Después de la salida de Endesa, y con 2.340 millones de euros en el bolsillo, la entidad que preside Miguel Blesa se convertiría en un inversor más que apetecible para Iberdrola. Eso sí, parece que ganas no le faltan, a juzgar por las declaraciones de Galán, quien afirmaba ayer que estarían " encantados de recibir a Caja Madrid como accionistas. Nuestra estructura de capital está compuesta en más de un 20 por ciento por cajas, y sólo nos falta Madrid. Desde luego, serían bienvenidos". Caja Madrid piensa destinar el dinero de Endesa a su expansión internacional.