La inmobiliaria esperará a que se estabilice el mercado para desprenderse del 10% de SFL y así cumplir la nueva ley MADRID. Prudencia. Esa es la actitud que ha decidido adoptar Inmobiliaria Colonial ante el panorama sombrío que viven las bolsas. Una teoría que ya ha puesto en práctica, pues la compañía que preside Luis Portillo ha decidido posponer la venta de un paquete accionarial de su filial francesa Société Foncière Lyonnaise (SFL) hasta que se estabilice el mercado, afirmó un portavoz de la inmobiliaria.Colonial preveía desprenderse después de verano del 10 por ciento del capital de SFL, donde controla el 85 por ciento. Una operación cuyo fin es cumplir las nuevas condiciones de la normativa francesa, que ofrece ventajas fiscales a las inmobiliarias que cotizan en bolsa y tienen una cartera de activos que explota en régimen de alquiler. Ahora esa ley dice que el dueño de ese tipo de inmobiliarias no debe controlar más del 60 por ciento del capital, si quiere seguir beneficiándose fiscalmente.Este es el caso de Colonial y su filial francesa. La inmobiliaria española debe reducir su presencia en el capital de SFL a lo largo de los próximos años. Para ello, pondrán en el mercado esos títulos que son bastante codiciados, según el portavoz de la compañía española, quien señaló que algunos inversores ya han tanteado el terreno para comprar acciones de SFL. Por ahora, esos pretendientes tendrán que esperar, ya que la operación se ha quedado paralizada.Integración con RiofisaEl dinero que se embolse Colonial con esta operación prevé destinarlo a amortizar un tramo del crédito de más de 7.000 millones de euros que tiene con varias entidades financieras internacionales (Calyon, Goldman Sachs, Royal Bank Scottland y Eurohypo). Esta es una de las posibilidades que maneja la inmobiliaria de Luis Portillo, que sigue trabajando en otros frentes como, la adquisición de Riofisa. La junta de accionistas de Riofisa aprobó ayer cambios en el consejo de administración y la exclusión de la compañía en bolsa. El objetivo de Portillo es integrar Riofisa dentro del grupo, de manera que la marca de la segunda inmobiliaria desaparecerá del mercado. Colonial creará una división internacional donde se incluirán los proyectos de centros comerciales que tiene Riofisa en los países del Este, principalmente.Con la fusión de Riofisa, Colonial espera elevar sus resultados. Unas cuentas que están en plena revisión por un cambio de criterio contable. Como consecuencia, en el primer trimestre de este año, Colonial ha reducido en 86 millones de euros la cifra de negocio. No obstante, esta modificación "no supone impacto alguno en los resultados ni en los fondos propios de la compañía y su grupo consolidado", señaló la compañía a la CNMV.