El indicador cede un 2,2 por ciento en la semana, siendo la mayor caída de los índices europeos. Las 'telecos' recortan las ganancias en el Stoxx 600 en el último mes. Por Isabel BlancoSesión con un poco de magia negra en el parqué que dejó al Ibex por debajo de los 10.000 puntos básicos. Así transcurrió la última jornada de la semana que, como cada tercer viernes de diciembre, estuvo marcada por la última de las cuatro cuádruples horas brujas que se producen a lo largo del año. Un fénomeno en el que coincide el vencimiento trimestral de opciones y futuros sobre índices y acciones, y que, además de marcar el devenir de los parqués, provoca fuertes movimientos durante la sesión, acompañados de elevados volúmenes. En la cuádruple hora bruja el vencimiento del futuro del Ibex cerró en 9.902 puntos, anticipando pocos cambios para las sesiones que restan para que finalice el año, y llegaron a negociarse hasta 563.000 futuros de los títulos de Telefónica. En la jornada, la volatilidad estuvo presente e hizo que el Ibex oscilara entre los 10.057,5 y los 9.850,10 puntos, para cerrar con un caída del 1,12 por ciento, en 9.898,10 puntos básicos, tras siete sesiones por encima de la barrera psicológica de los 10.000 puntos. La hora bruja provocó también que se incrementara el volumen. Los inversores negociaron 7.151,5 millones de euros. Las caídas del viernes hicieron que las pérdidas acumuladas por el Ibex en la semana se situaran en el 2,2 por ciento. Mientras que el Dax y el EuroStoxx 50 solo retrocedieron un 0,34 y un 0,01 por ciento, respectivamente, e incluso algunos indicadores se apuntaron alzas en la semana -el Cac francés repuntó un 0,26 por ciento-. Se cerró de esta manera una semana en la que Moody's ha dejado plasmado que no todo está resuelto en los países de la periferia europea. La agencia amenazó el miércoles a España con un recorte de su perspectiva. Al día siguiente le tocó el turno a Grecia, a la que avisó sobre una posible rebaja de su nota crediticia, para que finalmente el viernes las advertencias de la agencia se convirtieran en un recorte de rating, esta vez para Irlanda. Así, Moody's rebajó cinco peldaños la nota de Irlanda, de Aa2 a Baa1, tras considerar, en otras cosas, la incertidumbre que se mantiene sobre las expectativas de crecimiento en el país así como su elevado endeudamiento. En el último mes, los repuntes se están imponiendo en las bolsas europeas. Ejemplo de ello es la revalorización del 4,8 por ciento que logra el Dax en estos treinta días y el alza del 2,8 por ciento del Cac. También el Eurostoxx 50 se anota un 1,4 por ciento de ganancias desde el pasado 16 de noviembre. Quién frena a Europa Pero no todos lo sectores están logrando un avance. Las telecos están protagonizando unas caídas que recortan las ganancias de los principales índices europeos. El sector de las telecomunicaciones en Europa cede más de un 1 por ciento en el último mes, con lo que el alza del Stoxx 600 no alcanza el 4,5 por ciento. Son las empresas de materiales básicos -en España, los títulos de ArcelorMittal se han revalorizado más de un 15 por ciento en un mes- y las empresas industriales las que están logrando las subidas más importantes. Así, el freno a las alzas en Europa lo pone ahora el sector de las telecomunicaciones. Telefónica es la que supone el mayor lastre dentro del sector, aunque no es la que más cae pese a que cede más de un 3 por ciento frente (ver gráfico). Después de el 5 de noviembre los títulos de Telefónica alcanzaran niveles no registrados desde enero (19,59 euros), ahora el precio de la teleco española ha cedido hasta los 17,06 euros. Eso sí, las expectativas de los bancos de inversión sobre la compañía no se han deteriorado. De hecho, el grupo que capitanea César Alierta luce desde hace un mes una recomendación de compra por parde del consenso de mercado, según los datos de la consultora FactSet. Todo lo contrario ha sucedido con la alemana Deutsche Telekom. Desde el pasado 7 de diciembre el consenso de mercado aconseja vender los títulos del grupo. Una recomendación que no sufría la alemana desde el año 2006.