Barcelona. Abertis integrará en una nueva sociedad denominada Invicat (Infraestructuras Viarias de Cataluña) las autopistas que gestiona en régimen de concesión y que son titularidad de la Generalitat. El Gobierno catalán dio luz verde a la creación de la nueva sociedad, que asume las autopistas C-31/C-32, Montgat-Mataró Palafolls, y la C-33, Barcelona-Montmeló. La escisión y creación de la filial permitirá disponer de unas cuentas, de un plan económico y de una política inversora diferenciada de las otras autopistas de Abertis en Cataluña, la AP-2 y la AP-7. "La independencia de las cuentas permite un seguimiento, control e incluso una fiscalidad más claras", apuntó el consejero de política territorial, Joaquim Nadal. Invicat podrá optar a concursos de nuevas concesiones viarias en Cataluña y, en un futuro, podría asumir e integrar las participaciones de Abertis en otras sociedades que gestionan autopistas de la Generalitat.