Fomento reconoce que durante la visita a Norteamérica para vender el AVE los inversores le preguntaron por LAEmadrid. Ahora lo reconocen. Ésa ha sido la frase más pronunciada entre los administradores de Loterías, que llevan más de un año manifestándose en contra de la privatización de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) que el Ejecutivo socialista les negaba, aunque era evidente. Tan evidente, que incluso fuentes del Ministerio de Fomento reconocieron, tras el anuncio de las medidas anticrisis de Zapatero, que en el viaje de José Blanco, ministro de Fomento a EEUU para vender el AVE, los inversores americanos le preguntaron por la venta de Loterías. Entre los fondos presentes en la reunión, trece se interesaron en invertir en España, entre ellos Citi Infrastruture Investors, The Carlyle Group, Global Infrastructure Partners, Goldman & Sachs Infrastructure, Macquire, Morgan Stanley Infrastructure, UBS Infrastructure Asset Managment y Deutsche Bank Infrastructure Investments. Es lógico que existan interesados en el 30 por ciento de LAE puesto que es de las pocas empresas públicas que generan beneficios. El año pasado, de hecho, las arcas públicas ingresaron 3.000 millones de los ingresos totales de LAE en 2009, que alcanzaron los 9.800 millones. Y ésa es, más o menos, la cifra que el Estado logrará ingresar de manera inmediata con la venta del 30 por ciento de LAE. Ya en 2006 la consultora McKinsey valoró el organismo en 30.000 millones, por tanto, el Estado ingresaría 10.000 millones aunque fuentes oficiales cifraron el ingreso en 5.000 millones. La pregunta que se hacen los principales afectados, los loteros, es ¿tan mal está la liquidez del Estado que prefiere 10.000 millones ya y dejar de ganar un 30 por ciento todos los años? Sólo una respuesta afirmativa explica la venta, se temen las fuentes consultadas. Por eso, no entienden que Zapatero enmarque las medidas dentro de un programa para generar empleo. "Nosotros siempre hemos dado beneficios y somos responsables de 12.000 empleos directos y 25.000 indirectos, ya han introducido las máquinas en gasolineras y estancos y su intención es seguir haciéndolo" explica Manuel Izquierdo, que definió la medida como "pan para hoy y hambre para mañana". Pero no son los únicos afectados que no miran con buenos ojos la medida anunciada por Zapatero. Juan José Sánchez Colilla, gerente de la Confederación Española de Organizaciones de Empresarios del Juego del Bingo (Cej) quien a los pocos minutos de conocer la venta del 30 por ciento de LAE exigió al Ejecutivo socialista un sector del juego privado "con las mismas reglas". Sánchez hizo hincapié en el hecho de que LAE se convertirá en un competidor directo para ellos pero con una distinta vara de medir. Sánchez se refiere a la publicidad que a ellos les prohíben hacer y a que LAE no pague impuestos, cuando ellos destinan más de una cuarta parte de la venta a las administraciones. Por eso, considera que con un operador nuevo, privado, más agresivo y con los mismos privilegios que LAE, "supondrá una revisión en lo que afecta al sector del bingo porque ingresa muchos más millones de euros en impuestos de los que va a ingresar el Gobierno con esta venta".