Fomento colocará hasta el 49% en bolsa y ya están interesados Abertis, Ferrovial y el capital riesgomadrid. Los interesados en entrar en el capital de Aena deberán asumir una inversión aproximada de 15.000 millones de euros. Además de los 9.000 millones de euros que vale sobre el papel el 49 por ciento de la entidad, los inversores privados -entre los que ya se barajan nombres como Ferrovial, Abertis y el capital riesgo- deberían asumir la mitad de la deuda del gestor público de los aeropuertos españoles, que en su totalidad ya supera los 12.000 millones de euros, debido a inversiones faraónicas como la T-4 del aeropuerto de Barajas o la T-3 de El Prat. Aunque las cifras no son oficiales -Aena debe de realizar todavía un cuaderno de ventas para dar entrada al capital público en su accionariado- la estimación realizada por Fomento es el pistoletazo de salida a la ambiciosa operación y se basan en multiplicar entre 15 y 18 veces el beneficio bruto de explotación (ebitda) de la empresa presidida por Juan Lema. El procedimiento comenzará el próximo viernes, cuando el Consejo de Ministros apruebe un Decreto-Ley para la modernización y liberalización de la gestión de los 47 aeropuertos que forman la red de Aena. Primero se creará la sociedad Aena Aeropuertos, en la que se adscriben el patrimonio, los bienes y la gestión de los mismos. Posible salida a bolsa La intención es tenerla lista antes de que finalice febrero de 2011 para empezar a elaborar el cuaderno de ventas y dar entrada a socios privados hasta un 49 por ciento del capital. El Ministerio de Fomento todavía no tiene cerrado cómo lo hará, pero la opción preferida es que la totalidad de este porcentaje o una parte significativa se coloque en bolsa para hacerla mucho más atractiva al inversor. Una vez que Aena Aeropuertos esté constituida, será el momento de elegir la forma de gestión de los 47 aeródromos de la red y Fomento ha puesto en la mesa tres alternativas. La primera es convertirlos en filiales. En este caso mantendrán su carácter público y Aena conservará siempre la mayoría. Se prevé que en este escenario entren los aeropuertos de rentabilidad intermedia. La segunda alternativa es que los aeródromos sean gestionados directamente por Aena Aeropuertos. Esta figura se aplica a las infraestructuras que no tienen ninguna rentabilidad por su poca afluencia de pasajeros y que casi funcionan como servicio público. La última posibilidad, la más atractiva para el inversor, es sacar los aeropuertos en concesión para que los explote el capital privado. Fomento tiene conocimiento de que ya hay interesados en este último modelo en el caso de los aeródromos de Madrid y Barcelona. Fuentes del Ministerio aseguran que José Blanco recibió ayer por lo menos media docena de llamadas mostrándole su interés en este caso. Para adjudicar estas concesiones, Fomento pondrá en marcha concursos públicos a los que deben acudir las empresas y los consorcios que así lo deseen. Es en este escenario donde ya han mostrado su interés Abertis y Ferrovial, empresas con una larga trayectoria en el terreno de la gestión aeroportuaria. En el caso de la compañía presidida por Rafael del Pino, ya tiene amplia experiencia en BAA, la Aena británica, de la cual es propietaria. Por su parte, el grupo de concesiones participado por La Caixa y ACS gestiona aeropuertos en media docena de países e incluso es socia de Aena en el mercado internacional. La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, reafirmaba ayer que El Prat y Barajas abren "inicialmente" la puerta de las concesiones, por lo que no se descarta que otros aeropuertos rentables opten por esta alternativa. La intención del Ministerio de Fomento es captar el capital privado para el 49 por ciento de Aena Aeropuertos y poner en marcha las dos concesiones de Madrid y Barcelona antes de que termine la legislatura, en marzo de 2012. Además de los 9.000 millones de euros que el Gobierno ingresaría por la operación, hay otras ventajas inmediatas. Desde Aena se asegura a elEconomista que sólo los intereses que el gestor público de los aeropuertos paga cada año por su deuda ascienden a 300 millones de euros. Si se elimina la mitad de este agujero, se ahorraría inmediatamente 150 millones de euros en costes financieros anuales. Mejorar la gestión comercial La entrada del capital privado en Aena Aeropuertos pretende mejorar la gestión comercial del ente. En el caso de infraestructuras como Heathrow, que está gestionada por Ferrovial, los ingresos comerciales son de un 60 por ciento, mientras que los ingresos aeroportuarios alcanzan el 40 por ciento restante. En Aena es casi al revés: sólo el 38 por ciento de los ingresos proceden de la explotación comercial y la mayoría, el 62 por ciento, es facturado por el negocio tradicional de un aeropuerto. Esto es lo que se quiere cambiar en Barajas y El Prat con la entrada de capital privado. Los ingresos anuales de Aena son aproximadamente de 3.000 millones de euros, repartidos entre 200 millones de pasajeros. Se calcula que Madrid podría representar el 25 por ciento del total de la facturación y que Barcelona supone el 15 por ciento de estos ingresos. Las mismas fuentes de Fomento añaden que "en todo momento quedarán garantizados los derechos de los trabajadores de Aena", incluso cuando se subrogen sus contratos a las concesiones que gestionen Madrid y Barajas. También se respetarán los contratos ya vigentes, como es el caso de la concesión de tiendas en los espacios comerciales de los aeropuertos.