La multinacional recibe la segunda demanda por no informar a los usuarios sobre el mantenimiento de la 'pila'nueva york. Ya van dos. Se ha presentado la segunda demanda contra la tecnológica Apple y el gigante de las telecomunicaciones AT&T por no informar a sus usuarios sobre los costes de relacionados con el mantenimiento de las baterías que dan vida al archiconocido iPhone. La querella, presentada en el distrito del Norte de California hace una semana por Sydney Leung, forma parte de una demanda colectiva que podría llegar a incluir cientos de miles de usuarios del dispositivo multifunción de Apple, que incluye labores de teléfono móvil, iPod y navegador de Internet, entre otras aplicaciones. Aún así, las alegaciones están calcadas a la primera demanda presentada contra la compañía que preside Steve Jobs el pasado mes de julio por José Trujillo.En los documentos de la querella se alega que la batería que alimenta el nuevo niño mimado de Apple debe ser reemplazada tras 300 recargas o de lo contrario, el funcionamiento del iPhone queda limitado. El caso es que según el manual del usuario que acompaña al teléfono, la batería debería conservar el 80 por ciento de sus facultades tras 400 ciclos completos de carga y descarga. Entre otros inconvenientes, también se recrimina a Apple no hacer mención sobre el recambio de baterías ni sus costes ni en el manual de instrucciones, ni en la caja que envuelve el aparato. Con este panorama parece que, de momento, dichas querellas no harán demasiado daño a la compañía ya que, curiosamente, ha obtenido el apoyo de los medios de comunicación en Estados Unidos y en buena parte de las páginas en Internet de información tecnológica, que han llegado a tildar estos hechos como "las demandas más estúpidas" de la historia tecnológica del país.