El fabricante de ordenadores anuncia que se defenderáNUEVA YORK. Fue uno de los casos más sonados en el mundo de los negocios estadounidense y parece que todavía su fantasma se cierne sobre Hewlett Packard. El año pasado, la compañía decidió tomarse la justicia por su mano y llevó adelante una investigación para dar con la fuente que filtraba a la prensa informaciones sobre las reuniones del Consejo de Administración. El escándalo provocó la dimisión de la entonces presidenta del consejo, Patricia Dunn, e impulsó una regulación del Congreso de Estados Unidos sobre las tácticas legales a utilizar en este tipo de casos. Cuando parecía que la calma volvía a los fueros del fabricante de ordenadores estadounidense, los periodistas de la web CNET, The Wall Street Journal y Associated Press de los que HP adquirió información de forma ilegal han demandado a la compañía, a la que acusan de violar su intimidad. Un portavoz de HP explicó que la empresa se sentía "decepcionada" por este revés al mismo tiempo que aseguró "se defenderá" de dichas acusaciones, que implican pinchazos telefónicos, registro de llamadas y acceso no autorizado al correo.