nueva york. Mattel, el mayor fabricante mundial de juguetes, anunciaba esta misma semana la retirada del mercado de varios millones de juguetes fabricados en China, por contener sustancias tóxicas como plomo en sus pinturas, así como imanes peligrosos. elEconomista entrevistó a Bryan Stockton, vicepresidente ejecutivo de Mattel International en Los Ángeles para entender cómo la compañía se ha metido en este lío y lo más importante, si saldrá airosa después de retirar del mercado casi 20 millones de juguetes. P Desde noviembre de 2006, Mattel era consciente de los problemas derivados con algunos de sus juguetes. ¿Por qué ha esperado la compañía hasta esta semana para ampliar esa retirada?R Lo cierto es que esta semana hemos hablado sobre dos asuntos distintos. Por un lado tenemos los juguetes con pequeños imanes como las Polly Pocket. El pasado mes de noviembre realizamos una retirada de ocho productos en total de los que habíamos recibido quejas sobre posibles desprendimientos de la zona imantada. De un tiempo a esta parte los imanes han estado incrementando su presencia más y más en la industria, por eso, Mattel y otras jugueteras junto con la Comisión de Seguridad del Consumidor de EE,UU decidimos revisar los estándares de seguridad sobre el uso de estos imanes en productos para niños. Como resultado, adoptamos nuevas medidas en enero de este año, cuyas normas de seguridad eran mucho más estrictas. En ese momento, Mattel decidió revisar productos fabricados cinco años atrás, exactamente desde enero de 2002, y finalmente hemos decidido que, aunque esos juguetes cumplían los requisitos de la época, no eran aptos para los más pequeños, por eso, también realizamos la retirada de los mismos. P Entonces ¿qué ocurre con el elevado nivel de plomo detectado en la pintura de los juguetes fabricados en China? R En este caso particular, encontramos que uno de los muñecos de la película Cars, el que representa al personaje de Sarge, tenía en su pintura niveles no permitidos de plomo. Sometimos el producto a nuestro sistema interno de controles y descubrimos que una de nuestras contratas, cuya colaboración con Mattel data de hace dos décadas utilizó pintura no aprobada por la compañía. Si esa contrata hubiera seguido las normas de Mattel no nos hubiéramos tenido que enfrentarnos a esta situación.P ¿Va tomar Mattel algún tipo de acción legal contra la contrata china a la que señalan como responsable del problema? R No vamos a comentar nada sobre posibles acciones legales pero puedo asegurarle que dicho fabricante chino ya no trabaja para la compañía. Además, creemos que otros distribuidores de los juguetes también podrían haber sido víctimas de este engaño.P Además de la retirada, ¿qué otras medidas tomará la compañía en el futuro?R Inmediatamente hemos puesto en marcha un sistema de control basado en tres puntos básicos e indispensables para evitar que esto pueda volver a ocurrir en el futuro. Primero, requerimos que sólo se utilicen pinturas procedentes de proveedores homologados y pedimos que cada lote de pintura sea revisado. Así pasa un total de tres exámenes, el de nuestros proveedores, el propio de Mattel y el de nuestros distribuidores; segundo, estamos incrementando los controles del proceso de producción en las fábricas de los proveedores, y aumentando controles aleatorios sin previo aviso; por último, estamos probando cada partida de productos fabricados antes de que lleguen a los consumidores. Dentro de este último punto se incluye una revisión minuciosa del presupuesto de todos los planes que se llevan alrededor del mundo. Es así como descubrimos el caso de la pintura en China. P ¿Seguirá, entonces, Mattel manteniendo subcontratas en China? R Claro, Mattel sigue manteniendo subcontratas en el continente asiático a través de los distribuidores y fabricantes en el país. Lo que pasa es que, a partir de ahora, los controles serán mucho más estrictos. Una cosa está clara, el que no siga nuestras normas no fabricará juguetes para Mattel.P ¿Cómo afectará esta situación a la compañía? R No existe ningún precio o coste que se pueda imponer a la seguridad de un juguete. Somos muy conscientes de que tenemos que hacer todo lo necesario para fabricar juguetes seguros. De momento, hemos destinado un total de 28.8 millones de dólares de los resultados de nuestro segundo trimestre para financiar la primera retirada de productos y costear otras medidas posteriores. P ¿Cree que esta retirada masiva de juguetes a nivel mundial afectará a las ventas de una de las épocas más importantes del año como es la temporada navideña?R Esperemos que no. Tenemos muy buenas relaciones con nuestros consumidores y nuestra marcas siempre han sido de confianza para el mercado mundial. Fisher Price ha estado presente en el mercado durante 75 años y otras marcas de Mattel ya tienen un recorrido de nada menos que 62 años. Parte de la confianza ganada durante ese tiempo ha sido a base de ser honestos con nuestros clientes y hacerles saber todos nuestros problemas, con total transparencia. Siempre hemos tomado las medidas precisas para buscar soluciones a los problemas que se nos han ido planteando por lo que espero que los consumidores confíen en las acciones que estamos llevando a cabo y no sólo se queden en el hecho de haber descubierto un problema. Hemos identificado el problema y le hemos dado una solución. Además, quisiera recordarle que durante estas últimas semanas nos hemos reunido con nuestros proveedores chinos para dejarles claro la importancia de distribuir juguetes seguros entre los niños de todo el planeta. P ¿Este problema que ustedes han tenido con las contratas chinas puede afectar a otros fabricantes mundiales de juguetes? R No puedo vaticinar sobre qué ocurrirá en otras compañías del sector que son competidoras nuestras. Sólo le puedo decir que Mattel se ha anticipado a solventar un asunto muy importante para mantener la integridad y el prestigio de su marca y asegurarse de que los niños juegan con juguetes sin correr ningún tipo de peligro. Eso para nosotros es, sin lugar a ningún tipo de duda, lo más importante.