En otoño se esperan más movimientos y el lanzamiento de nuevas marcasbilbao. El mercado de la telefonía móvil en España sigue siendo cosa de tres colores: azul Movistar, rojo Vodafone y naranja Orange. Los tres grandes operadores, los decanos del mercado, apenas han perdido cuota en favor de los nuevos operadores, tanto en número de líneas como en porcentaje de ingresos. En febrero de 2006 la CMT aprobó el reglamento para la entrada en la partida de los denominados Operadores Móviles Virtuales (OMV), que prestarían servicios a través de las redes de los operadores con licencia tradicional. La llegada de los tres primeros OMV al mercado -Carrefour Móvil, Euskaltel y Happy Móvil- coincidió con la puesta en funcionamiento del cuarto competidor con licencia propia Yoigo (Xfera). A pesar de que todos ellos comenzaron a operar a finales del 2006, no es hasta el primer semestre de este año donde se aprecian los primeros resultados. Por el momento, en conjunto, éstos pueden calificarse de tímidos, ya que entre los cuatro rascan algo más de 460.000 líneas activas, lo que representa apenas el uno por ciento del total del sector. Según datos de la CMT a 30 de junio en España existían un total de 48,14 millones de líneas móviles activas. Se trata de un mercado que aún crece y que en los últimos seis meses ha registrado 1,91 millones de altas nuevas. Un informe de la CMT sobre ingresos sectoriales, referido al 31 de marzo, atribuía a los nuevos operadores unos ingresos de 12,48 millones, cantidad aún poco representativa, para una tarta de 3.487 millones en el primer trimestre.Seducir al clienteUn factor a destacar del último trimestre, según se aprecia en los informes de la CMT, que los operadores tradicionales ven cómo el veinte por ciento de las nuevas líneas se decantan por los nuevos operadores. Se trata de una tendencia creciente y que augura una mayor penetración del mercado para los nuevos actores. Hasta el momento la irrupción más fuerte en el mercado ha sido la de Euskaltel, aunque se trata de un caso muy peculiar no extrapolable al resto sector. El operador vasco compartía desde 1998 los clientes móviles con Amena, pero tras su absorción por Orange hubo divorcio y se desencadenó una guerra por la portabilidad de los números que lo que le ha reportado más de 200.000 clientes a Euskaltel gracias a su gran penetración en el mercado vasco. Este litigio es uno de los motivos fundamentales de la pérdida de clientes en portabilidad de Orange. El caso de Yoigo es muy diferente, la portabilidad le ha aportado sólo un tercio de sus clientes, donde más éxito ha cosechado es en captar nuevas líneas. Los datos de Carrefour Móvil y Happy Móvil por el momento son bastante tímidos. A pesar de la diferencia entre sus compañías matrices, ambas coinciden en que en sus establecimientos se comercializan además marcas de otros operadores. Competencia y negocioLa penetración de los OMV supone para los operadores convencionales una oportunidad, al tiempo que un riesgo. El peligro radica en que les quiten muchos clientes y la oportunidad es que gracias al alquiler de sus redes al menos conseguirán facturar una parte del ingreso de dichos clientes. En los próximos meses se espera la aparición en el mercado de un amplio abanico de OMV que estrecharán el cerco a un mercado y que se basará en la fidelización de clientes ya captados para otros servicios y en la confluencia de servicios de telefonía fija y móvil.Por el momento, el operador que más acuerdos tiene con OMV es Vodafone, red que da soporte hoy día a Euskaltel y que tiene convenios con BT, R Cable, Telecable, Pepemobile, Eroski y Lebara.Le sigue Orange, que ya tiene activos a Carrefour Móvil y a Happy Móvil (The Phone House). Finalmente Movistar cerró acuerdos con El Corte Ingles y con ONO, sin que por el momento ninguno esté activo. Además, el operador azul tiene un pacto con Yoigo para darle cobertura donde aún no ha llegado.