La empresa acometió en 2000 el mismo plan de reducción de costesmadrid. "La mayoría de las reestructuraciones conciernen a Europa", donde trabajan 44.000 empleados de la empresa, precisó ayer el consejero delegado de Unilever, Patrick Cescau, sin dar más detalles. Este ejecutivo está obsesionado por hacer de la multinacional una empresa ágil y competitiva, siempre pendiente de su principal competidora Procter & Gamble. Bajo la égida de Cescau, el productor de los desodorantes Rexona y de los productos de cuidado corporal Sunsilk, inició un programa de reducción del personal administrativo y se reorientó estratégicamente hacia los cuidados del cuerpo, los mercados emergentes y la vitalidad.En el año 2000, Unilever lanzó un programa titulado En ruta hacia el crecimiento para rentabilizar el coloso que era entonces, con cerca de 1.600 marcas, en un mercado cada vez más competitivo."Desde el año 2000, cerramos o vendimos más de 100 fábricas", subrayó Cescau ayer. El impresionante número de marcas de la multinacional descendió desde entonces a 400. "Pero actualmente, una organización más simple, sistemas informáticos convergentes, un sistema de marcas y de productos más ajustado a nuestras metas y cada vez más armonioso otorgan un margen aún más grande para reorganizar y para un proceso de producción más flexible", agregó el presidente de la compañía.