El gigante financiero lo sitúa como principal riesgo y prevé posibles fusiones madrid. Cada vez son más. Los gigantes financieros del mundo coinciden en la sobreexposición de la banca española al ladrillo. El último en advertir ha sido el coloso estadounidense Goldman Sachs, que ayer emitió un informe clarividente. En el análisis, la entidad observa que "el mayor riesgo para el sector es una fuerte ralentización del sector inmobiliario, al cual los bancos españoles están más expuestos", explicó en el documento. Las familias españolas españolas deben a las entidades 726.126 millones de euros, al calor del boom hipotecario. Aunque todavía la morosidad está en niveles históricamente mínimos -0,46 por ciento en hipotecas- a la banca no dejan de colárseles clientes morosos o con retrasos. Así, ya soporta más de 5.770 millones en créditos dudosos, después de ver cómo se han disparado en los últimos meses. La subidas de tipos de interés y la escalada del Euribor ha hecho mella en los bolsillos de los españoles.Y con las empresas inmobiliarias la situación no es muy distinta. Los promotores deben a los bancos 112.358 millones de euros, aunque los créditos morosos o con retrasos aún son muy bajos -197 millones-. Otra cosa son las cajas, que casi triplican la mora de la banca. No obstante, en su informe Goldman Sachs confía en que los beneficios de los cinco grandes bancos analizados -Santander, BBVA, Popular, Sabadell y Bankinter- muestren "una sólida trayectoria de crecimiento". Además, el estudio señala la diversificación como un factor que diferenciará a los bancos y se refiere a a América Latina subrayando la reducción de la "prima de riesgo", gracias a Brasil y México. Entre la gran banca, Goldman Sachs ha reiterado su predilección por BBVA así como por la banca española en general en comparación con nuestros vecinos europeos.Uniones en la banca medianaPero no es la única perla lanzada por la entidad estadounidense. Al referirse a la banca mediana augura que puede haber fusiones inminentes: "esta actividad se mantiene como una fuerza a tener en cuenta en los pequeños bancos españoles", afirma en referencia a Popular, Sabadell y Bankinter.Desde Goldman Sachs mantienen una recomendación neutral sobre los bancos presididos por Ángel Ron y José Oliú, mientras que para el pilotado por el flamante Pedro Guerrero aconsejan vender al considerar que la reducción de los múltiplos puede continuar.