La empresa salmantina lanzará en 2011 su kit de medicina personalizada para el tratamiento de la leucemiavalladolid. Si la biotecnología es la medicina del futuro, la empresa salmantina Vivia Biotech quiere estar en la punta de lanza. Desde su fundación, en septiembre del 2007, se ha empleado en proyectos de investigación en la lucha contra el cáncer de sangre, financiados por tres fondos de capital riesgo: Suanfarma Biotech, Clave Mayor y Ade Capital Sodical. Vivia Biotech no busca nuevas medicinas contra el cáncer, sino que su tecnología ExviTech permite analizar en muestras de sangre recién extraídas el efecto de miles de fármacos tradicionales para detectar sus potenciales propiedades en la lucha contra la leucemia. Ahora preparan el lanzamiento para 2011 de lo que será su primer producto comercial: un innovador kit de medicina personalizada; una nueva forma de tratar el cáncer adaptado a las características individuales de cada paciente. Tal y como explica su director general, Andrés Ballesteros, "en vez de dar un tratamiento estándar, vamos a identificar antes a qué tratamiento el paciente va a responder mejor". Para desarrollar este nuevo sistema, a finales de año esperan tener terminado el nuevo laboratorio que se ubicará en Segovia: "Necesitamos centralizar muestras de pacientes de cánceres hematológicos de toda Europa. Segovia tiene una cercanía con Madrid y por tanto con Europa que nos parece muy atractiva" explica Ballesteros. Estas necesidades logísticas son cruciales en su profesión, ya que las muestras que usan deben estar frescas cuando llegan a la mesa de trabajo, por lo que los envíos no pueden tardar más de 24 horas. De esta forma, el centro de Salamanca mantendrá su vocación de innovación mientras que el segoviano, con una inversión de alrededor de 1,5 millones de euros, será el cuartel general de la empresa y donde se realizará el nuevo test de medicina personalizada para los pacientes de toda Europa. Contará con 20 trabajadores que se sumarán a los 28 que forman la plantilla actual, todos con formación superior. Desde su creación, de la mano de los hermanos Joan y Andrés Ballesteros, Vivia Biotech ha permanecido fiel a una filosofía basada en el capital humano, atrayendo a los mejores talentos de todo el mundo. Su presidente, Joan Ballesteros, trabajó durante 16 años en EEUU. Al llegar a Salamanca se trajo de la mano a algunos de sus compañeros como la actual vicepresidenta de Investigación, Teresa Bennett, o el Jefe de Bioinformática y Automatización, Coyt Jackson. Fue en su etapa americana cuando Ballesteros desarrolló el sistema que permite analizar el efecto de hasta 2000 fármacos en una muestra de sangre recién extraída. Así es como buscan un remedio contra el cáncer de sangre - enfermedades como la leucemia, el linfoma o el mieloma múltiple - a partir de componentes de medicamentos "de toda la vida" a los que descubren nuevos usos -lo que llaman reprofiling-. Eso es lo que les hace diferentes en Salamanca; la capital mundial de la investigación de estas patologías.