madrid. El Banco Sabadell culminó ayer una emisión de cédulas hipotecarias por importe de 1.000 millones de euros a un plazo de dos años. El periodo de suscripción se abrió y se cerró en el mismo día, una vez que había quedado ampliamente sobresuscrita la emisión, dirigida a inversores cualificados, tanto nacionales como extranjeros. El propio Banco Sabadell, junto a Barclays, Commerzbank, Natixis y Nomura fueron las entidades colocadoras de la emisión, cuyo desembolso está previsto para el próximo 10 de septiembre. Esta emisión de deuda, que se une a las del Popular y la pasada semana por Banesto, demuestran la recuperación de la confianza en el mercado de deuda española, no sólo la realizada por el Tesoro Público, sino también la privada.