Amplía su capacidad para ofrecer servicios avanzados después de pagar 412 millonesmadrid. Telefónica ha dado un nuevo paso para crecer en México, el segundo país de mayor peso en su cartera latinoamericana tras Brasil. La Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) acordó el pasado lunes adjudicar a Pegaso Comunicaciones y Sistemas, perteneciente al grupo Telefónica, seis bloques de frecuencias del espectro radioeléctrico en la banda 1.700 y 2.100 Megahercios (MHz) de cobertura nacional. A cambio de estas seis nuevas concesiones, Pegaso deberá afrontar un primer pago de 1.273 millones de pesos (78,2 millones de euros) en los próximos 45 días naturales, además de otros 5.433 millones de pesos (333,8 millones de euros) anuales correspondientes al valor de los derechos adquiridos. En total, la multinacional española tendrá que desembolsar 6.707 millones de pesos (412 millones de euros). Más ancho de banda A cambio de esta cantidad podrá disponer de ancho de banda suplementario para ofrecer en el futuro servicios de telefonía de cuarta generación en seis zonas distintas del país, incluida México D.F, según informan fuentes de la operadora. Cofetel, organismo encargado de regular las telecomunicaciones en México, expresó que Telefónica resultó ganadora de estos concursos al cumplir "satisfactoriamente" con los criterios no económicos y económicos estipulados y al no exceder los límites de acumulación de espectro radioeléctrico establecidos en la ley. Con todo, la gran beneficiada de esta nueva puja fue Radiomóvil Dipsa, del grupo mexicano Telcel, propiedad del archimillonario Carlos Slim, adjudicataria de nuevos 21 bloques de frecuencias por los que pagará 16.494 millones de pesos (1.1013 millones de euros). Tras el concurso resuelto el pasado lunes por Cofetel, Telefónica México se sitúa por detrás de la poderosa Telcel, pero aventaja a Iusacell y Nextel, sus más directos competido-res en el país. A estas frecuencias adjudicadas hay que añadir otros ocho bloques adicionales de espectro radioeléctrico obtenidos en la licitación aprobada el pasado 16 de julio, esta vez en la banda de frecuencias comprendida entre los 1.875 y 1.985 Megahercios, que en su mayor parte serán destinados a mejorar los servicios de banda ancha móvil de tercera generación en las áreas metropolitanas de los 32 estados del país. El valor de estos bloques ascendió a 258,9 millones de euros. La apuesta de Telefónica por México no es nueva. En los últimos cinco años ha invertido más de 7.000 millones de euros para abrirse un hueco en un sector dominado por la tela de araña que conforman las empresas del magnate Carlos Slim. De hecho, después de Brasil, México es el segundo país del grupo español con mayor número de clientes de telefonía móvil en Latinoamérica, con una cuota de mercado del 21 por ciento y un nivel de penetración del 79 por ciento. Casi 19 millones de clientes Según los datos económicos correspondientes al segundo semestre del año, el número total de accesos ascendía a 18,7 millones a finales de junio, de los cuales 18,3 correspondían a telefonía móvil y el resto a fija. De enero a junio Movistar logró una ganancia neta de 856.000 nuevos accesos móviles (39,9 por ciento de crecimiento interanual) y redujo la marcha de clientes a sólo el 2,2 por ciento. Además de mejorar la fideli- zación de sus clientes, Movistar México ha comenzado a ladear la balanza de los clientes con contrato (1,3 millones), frente a los de prepago (16,9 millones). De enero a junio el 33 por ciento de las altas optaron por suscribir un contrato, frente al 3 por ciento contabilizado en 2009. Un drástico cambio que debe convertirse en la palanca de crecimiento futuro.