González-Páramo reclama a las entidades que se capitalicen más para poder conceder préstamosBBVA coincide con el ente emisor y ve "positiva" la reforma de las cajas y la prórroga del Frobmadrid. Las catorce operaciones de fusión en las cajas de ahorros y la única en los bancos emprendidas hasta la fecha no son suficientes. Al menos ésta es la opinión del Banco Central Europeo (BCE), compartida por la segunda entidad española, BBVA. El encargado de trasladar el mensaje del organismo comunitario ha sido el representante de nuestro país en su Comisión Ejecutiva, José Manuel González-Páramo, asegura que el ajuste en el sistema financiero "no ha terminado", según informa Ep. De esta manera se posiciona en contra del Banco de España, que hace menos de un mes daba por concluido el proceso de reestructuración del sector, que ha costado al erario público 11.000 millones. González-Páramo sostiene que habrá más integraciones, a pesar de los "importantes" avances hechos hasta ahora, como la reestructuración de las cajas, la publicación de los resultados de los test de estrés y la reforma legal de las entidades de ahorros para que puedan capitalizarse en los mercados al igual que los bancos. Proceso de urgencia "Si las medidas de integración y reorganización pendientes y los cambios normativos se realizan con urgencia y seriedad, el sistema financiero español habrá dado un paso cualitativo en términos de estabilidad y capacidad de resistencia", asegura el consejero del BCE. El número de cajas se ha reducido a más de la mitad y los bancos han comenzado a moverse con la absorción del Guipuzcoano por parte del Sabadell. En el horizonte se atisban otras operaciones, como la posible fusión de Unicaja y Cajasol y de las tres cajas vascas. Una mayor consolidación, a través de integraciones y de ajustes de plantilla y oficinas, ayudarían a mejorar más la confianza en el sistema español iniciada tras la publicación de los test de estrés. Así lo cree González-Páramo, quien también reclama a las cajas más transparencia y que se habrán a inversores privados para captar fondos de primera categoría. "En el caso español existe una dificultad específica relacionada con las cajas, relativamente poco transparentes y con difícil acceso a fondos de alta calidad", considera el consejero del BCE. Más solvencia y más crédito González-Páramo no sólo apunta hacia las entidades de ahorros. También pone deberes a sus rivales los bancos. Les insta a que fortalezcan sus posiciones de solvencia y sus modelos de negocio con el objetivo de poder incrementar el flujo del crédito "cuando la recuperación de la economía empiece". A su juicio, todas las entidades tienen que contribuir a la salida de la recesión, como lo están haciendo los organismos internacionales con medidas excepcionales. En este sentido recuerda las garantías de liquidez aportadas por el propio BCE al sistema financiero para estabilizar su situación ante la desconfianza de los inversores. Las palabras de González Páramo son similares a la visión que tiene BBVA sobre el panorama del sector. El Servicios de Estudios de la segunda entidad financiera española considera que el "nivel de consolidación es insuficiente", aunque las fusiones iniciadas "van en la dirección correcta". Además, hace referencia a la publicación de los test de estrés, a la reforma de la ley de cajas y a la prórroga hasta finales de año de la utilización del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob). Problemas acotados BBVA considera que las pruebas de resistencia han demostrado que los problemas del sector español están "acotados" y que existen mecanismos para que las entidades más vulnerables puedan afrontar las dificultades. Estas herramientas serían el Frob y las modificaciones realizadas por el Gobierno para que las cajas se privaticen a través de las entrada de inversores en su capital. El Servicio de Estudios del banco opina que la reforma legal de las entidades de ahorros ha llegado en un "momento oportuno" y supone "una noticia positiva" para la economía nacional. Pero BBVA se reafirma en su postura y vuelve a reclamar reglas de juego claras en el proceso de reordenación del sector para que se respete lo máximo posible la competencia. En los últimos años, el banco, como sus homólogos españoles, han reivindicado que las ayudas públicas no distorsionen el terreno operativo neutral que hasta el inicio de la crisis estaba garantizado tanto en España como el resto de Europa y en Estados Unidos.