Sebastián ofreció un 15% más de potencia a las renovables en el Pacto de Zurbanomadrid. El Ministerio de Industria ha presentado a los grupos parlamentarios un borrador con doce propuestas de conclusión para los trabajos de la Subcomisión para el análisis de la estrategia energética de los próximos 25 años. En dicho documento, el Gobierno duplica la producción y la instalación de energías renovables pero las deja muy lejos de su primera iniciativa del Pacto de Zurbano, adelantada por elEconomista. Industria fija ahora un total de 64.441 MW para las renovables frente a los 74.547 MW que se ponían como objetivo en aquel momento. Para llevar a cabo este 'hachazo', que se ha esforzado en vender como una apuesta de crecimiento, mete la tijera a algunas de las tecnologías como la solar, a la que reduce en 5.143 MW la potencia a instalar desde los 15.685 MW que tenía previstos a los 10.542MW que marca ahora y que se reparten en 6.735 para la fotovoltaica y 3.807 MW para la termosolar, que es la que sufre gran parte del recorte. En los tijeretazos se observa también que el Gobierno abandona prácticamente los planes de crecimiento de la eólica marina que pasa de los 5.000 MW que había previsto a simplemente 500 MW, lo que supone dejar este tipo de parques prácticamente en una tecnología experimental en España. Industria recorta también a la biomasa que pasa de 2.200 MW a 1.737 MW y aumenta el gas natural y la cogeneración en 300 MW para alcanzar los 37.971 MW. Coste del gas Según las cuentas que ha realizado el Ministerio, se espera que el coste del gas natural se incremente un 22 por ciento (23 euros por megavatios hora en 2020 en euros constantes del 2010 frente a los 17 euros por megavatio hora del 2009). Al mismo tiempo, el Ejecutivo considera que el precio de la tonelada de CO2 puede pasar de 13,5 euros a 25 euros en 2020. Con esta situación, el coste de generación eléctrica de las centrales de ciclo combinado podría superar los 80 euros por megavatio hora en 2020 y alcanzar los 100 euros por megavatio en un escenario de precios altos. En esta situación, la tecnología eólica resulta ya, a día de hoy, competitiva ya que se paga del orden de 95 euros por megavatio antes de recortarse su retribución. El ministerio explica que el coste de las renovables tiende a reducirse en el tiempo a un ritmo que es mayor cuanto más amplio sea el apoyo que reciben en sus fases iniciales de desarrollo, debido a los efetos de escala y de mejora de la eficiencia en el diseño y la ingeniería de las tecnologías. Por ese motivo, considera que dada la tendencia creciente de los combustibles fósiles pasan a resultar más competitivas que las primeras. Pese a este tijeratazo, el Gobierno mantiene que se duplique la potencia instalada desde los 39.499 MW hasta los 64.441 MW. La nuclear se mantiene La energía nuclear aumentará más de un 5 por ciento su papel en la producción, aunque reducirá su potencia instalada en un potencia similar a la de Garoña, no se clarifica si se realizarán las repotencia- ciones de varias centrales que puedan llevarse a cabo. El documento, que sigue en discusión hasta el próximo miércoles, contempla que el tamaño del sector energético, medido por el consumo de energía final será "prácticamente el mismo" en 2020 que en 2009, ya que el crecimiento económico será compensado por los avances en ahorro y eficiencia energética. Propone un modelo en el que la potencia instalada habrá aumentado en un 25 por ciento, hasta los 126.072MW, de los que la mitad, 64.441 MW, son renovables. Asimismo, plantea que la demanda final de electricidad alcance los 313.052 GWh, un 28,3 por ciento más que en 2009, mientras que la producción bruta crecerá un 32,6 por ciento, hasta los 393.260 GWh, que será cubierta en un 35,5 por ciento por renovables, "al ser en este sector donde existen más alternativas y un estado de madurez más elevado", según Industria. Según la propuesta, el resto del 'mix' tendrá una composición más equilibrada que el actual, con un incremento del gas, del 0,4 por ciento, hasta el 37,8 por ciento con unas horas medias de funcionamiento de los ciclos combinados de 3.460 al año. Las propuestas se acompañan de un documento de previsiones que recoge una estimación sobre la evolución de los costes que revela una reducción en casi todas las fuentes, salvo en la solar, que caerán hasta un 50 por ciento en 2020, si bien seguirán siendo más que la eólica.