El parque, controlado por Bancaja y CAM, cambia de imagen para atraer públicovalencia. El próximo martes se cumplen 10 años de la inauguración del parque temático Terra Mítica en Benidorm (Alicante), y el balance no puede ser más triste: más de 200 millones de euros en pérdidas acumuladas -restados los dos años de beneficios por venta de terrenos-, en un negocio que fue impulsado con criterios políticos y escasa planificación por el Gobierno de Eduardo Zaplana. El parque nació independiente de las grandes cadenas de ocio temático, con una inversión de 240 millones de euros en la que la Generalitat embarcó a Bancaja, CAM y numerosos empresarios valencianos. Preveía 4 millones de visitantes al año, pero apenas superó los 1,5 millones en sus mejores momentos. Tan evidente fue el desatino, que la Generalitat buscó, ya en 2001, un socio especializado. En octubre de ese año se echó en brazos de Paramount Parks con un contrato leonino para las arcas públicas y para el propio parque -pagaban al grupo norteamericano 3,5 millones de euros limpios al año, más porcentaje de beneficios-, que no enderezó su rumbo. De hecho, Paramount Parks no aportó ni su marca ni sus personajes, por lo que Terra Mítica decidió rescindir el contrato a finales de 2004. Pocos meses antes, las pérdidas crecientes y las deudas llevaron a la sociedad a la entonces denominada suspensión de pagos, con un pasivo de 218 millones. Los mayores acreedores eran Bancaja y CAM, que además eran accionistas con un 20 por ciento cada una. Las dos cajas, que ya habían perdido en el negocio 30 millones al forzar una operación acordeón en 2003, se vieron obligadas a capitalizar todo su crédito, 53 millones, con lo que alcanzaron el 24 por ciento del capital cada una, igual que la Generalitat. El resto de acreedores aceptaron una quita del 50 por ciento. Nueva etapa y nuevas pérdidas Tras salir del concurso en 2006, Terra Mítica vendió los terrenos reservados para su ampliación por 82 millones, lo que le permitió tener dos años de beneficios. Un espejismo. En 2008 volvieron las pérdidas y la evidencia de que la estructura del parque aún era demasiado grande para hacerlo viable. La empresa contrató hace un año a Juan José de Torres como director general, procedente del parque Warner de Madrid, que antes había puesto en marcha el Oceanográfico de Valencia. De Torres afirmó al llegar que el parque necesitaba un cambio de imagen para atraer al público familiar. Ya lo ha encontrado. Terra Mítica acaba de fichar a viejos conocidos de los dibujos animados como la abeja Maya, Heidi y Vicky El Vikingo. El contrato con Planeta Junior, propietario de los derechos en España, es por tres años.