Tras las sucursales, Fainé avanza ya ajustes en los servicios centrales de las cajasMADRID. Nuevo entorno, nuevas exigencias. El marco legal en el que se tendrá que mover a partir de ahora las cajas de ahorros obliga a tomar decisiones y una de las más urgentes será la de salir de los mercados de capitales. De lo contrario, "desaparecerán". La advertencia la lanzaba ayer el presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Isidro Fainé, que también reconocía que hay otras cajas que podrán permanecer en su nicho de mercado. En un encuentro con los medios de comunicación escritos, se felicitó por la aprobación de la nueva de Ley Orgánica Rectora de las Cajas de Ahorros (LORCA) al entender que soluciona la asignatura pendiente de las cajas de ahorros de acceder a los mercados de capital "porque si quieres dimensión, tienes que estar en los mercados". ¿Supone la nueva ley una bancarización de las cajas? Fainé recordó que a su llegada La Caixa se le acusó de intentar bancarizar la entidad catalana y la historia se repite ahora... por lo que quiso aclarar que la nueva ley permite que las cajas que quieran "serán cajas siempre". "Hay cajas que no tendr´na que hacer nada y otras a las que tienen abiertas muchas fórmulas", apuntó. La decisión de La Caixa Aprovechando que también es presidente de La Caixa, Isidro Fainé no tuvo reparos en adelantar que en el caso de la entidad que preside seguirá siendo una caja y que, por el momento, no se plantea emitir cuotas participativas. Sin embargo, no dejó pasar la oportunidad para poner relieve que uno de los problemas a los que se enfrentan ahora las cajas de ahorros a consecuencia de la reestructuración, es la sobrecapacidad de los servicios centrales. En este sentido, tras el ajuste de las sucursales bancarias vendrá el de estos departamentos de las cajas de ahorros que en el caso de La Caixa supone el 6,3 por ciento del empleo total y que, según el propio Isidro Fainé, "se puede ajustar aún más".