La aseguradora, que mantendrá un 1% del capital, tendrá que anotarse 44 millones de minusvalías con esta operaciónMADRID. Mutua Madrileña se desprenderá del 4 por ciento de Sacyr Vallehermoso a través de Goldman Sachs, al que ha contratado para que coloque entre inversores institucionales este paquete. La participación valorada en unos 54,4 millones de euros generará unas minusvalías a la aseguradora de 44 millones si la operación se cierra a precios de mercado de ayer, 4,43 euros, ya que tenía anotada en sus libros las acciones a 8 euros, la cotización a cierre de 2009 de la constructora. Goldman Sanchs está intentando colocar entre inversores cualificados un paquete de 12,19 millones de acciones de la compañía que preside Luis del Rivero, con lo que la Mutua Madrileña se quedaría con el equivalente al 1 por ciento del capital. A principios de mayo, el presidente de la Mutua Madrileña, Ignacio Garralda, insistió en el interés de la compañía en desprenderse de esta participación ya que "con la perspectiva histórica, no ha sido una inversión brillante". Argumentaba que los cambios contables que entraron en vigor en 2008 generaban estrés en la cuenta de resultados de la aseguradora, debido a que ahora había que contabilizar día a día el cambio de valor de las cotización y llevarlas a la partida de pérdidas y ganancias. Con anterioridad se provisionaba en caso de que la diferencia fuera negativa. Debido a las modificaciones el ejercicio pasado, Mutua logró 23 millones de euros de beneficios extra- ordinarios. La aseguradora desembarcó en el capital de Sacyr en septiembre de 2006. Embolsó entonces 450 millones por el 5 por ciento del capital. Desde entonces la compañía ha recibido dividendos de la constructora pero ahora tras la decisión de suspender el pago del mismo, la Mutua ha decidido reducir su exposición y no esperar a conocer si tal y como anunció Luis del Rivero en la pasada junta de accionistas la retribución al accionista se volverá a recuperar el próximo año. Por otra parte, trabajadores de las obras del tercer juego de esclusas del Canal de Panamá, que construye Sacyr con otros socios, llevaron ayer adelante una protesta en demanda de aumento salarial y mejores condiciones de trabajo.