Madrid. British Airways ya da pistas sobre su estrategia de reparto de rutas una vez se consolide la fusión con Iberia. La aerolínea británica comienza a desplazar sus rutas latinoamericanas de largo reco- rrido de Heathrow -ante la saturación del primer aeropuerto londinense- y allana el camino a Barajas para cuando ambos grupos comiencen a operar y decidir estrategias de manera conjunta el próximo 1 de enero. En concreto, la compañía dirigida por Willie Walsh se lleva a Gatwick sus vuelos Londres-Cancún, que empezarán a operar desde noviembre en una frecuencia de dos días a la semana. Pero no es el único paso que ha tomado la aerolínea británica en esta dirección. Fuentes conocedoras de la estrategia de la compañía explican a este periódico que la intención de BA para los próximos meses es "adquirir el mayor número de derechos de vuelo posibles en otros aeropuertos londinenses que no sean Heathrow, como primer paso a la reorganización de rutas". La intención del nuevo gigante formado por British Airways e Iberia es agrupar la mayoría de los vuelos de largo radio al Atlántico Norte y a Asia en Londres, mientras que "en Barajas se agruparán las rutas más importantes a Latinoamérica y a todo el continente africano", añaden las mismas fuentes. De esta manera, al ya esperado control del negocio en los países de habla hispana, Madrid también se convertirá en un hub de referencia para África, continente en el que hasta ahora apuesta más por destinos con los países del Norte, como es el caso de Argelia o Marruecos, aunque también tiene conexiones con otras naciones como Nigeria y Sudáfrica. Crecimiento en Madrid Mientras que la capacidad de Heathrow ya ha alcanzado su límite, al aeropuerto de Barajas todavía le queda una capacidad de crecimiento de operaciones a la hora de un 30 por ciento como mínimo. El nuevo Gobierno de Cameron ya ha suspendido la nueva pista prevista para el aeropuerto londinense, por lo que su crecimiento está cercenado para los próximos diez años. Y es que Heathrow no da para más. Según datos de pasajeros de British Airways registrados en el pasado mes de junio, por la Terminal 5 del aeropuerto londinense ya han pasado 50 millones de clientes de la aerolínea británica desde su inauguración en marzo de 2008. En ese mismo mes, British transportó 2,56 millones de pasajeros, lo que supone un retroceso del 12,5 por ciento con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La principal causa de este descenso se debe a los efectos de la huelga de tripulantes de cabina (TCP) durante los primeros nueves días de junio. El mayor descenso se produjo en las cone- xiones con Asia-Pafífico, un 17 por ciento menos.