La constructora española no pierde fuerzas y gana un contrato de una planta por 440 millones madrid. Sacyr Vallehermoso y Rayet continúan por separado su lucha contra la máxima cúpula de Eiffage en los tribunales. Hoy, ambas compañías tienen sendas vistas en el Tribunal de Comercio de Nanterre, en las proximidades de París, para exponer los argumentos de las respectivas denuncias que tienen presentadas contra su participada francesa Eiffage, informó Ep. Esta vista no será ni la única, ni la definitiva y no se espera que el tribunal se pronuncie sobre el caso. Con este litigio, las dos empresas persiguen que se anule la última junta de accionistas de Eiffage, en la que la dirección de esta compañía suprimió derechos de voto a Rayet y a un colectivo de otros 88 accionistas españoles, titulares en conjunto del 18 por ciento de su capital, alegando una supuesta concertación con Sacyr. Esta lucha en los tribunales no ha restado fuerzas a Sacyr que ha conseguido un contrato. En concreto, el consorcio encabezado por Sufi, filial de servicios medioambientales de Sacyr, y Veolia Propreté se ha adjudicado un contrato de 440 millones de euros para la construcción y explotación de una planta de tratamiento y valorización energética de residuos en Mataró (Barcelona). Sufi y Veolia Propreté participan con un 38 por ciento cada uno en el consorcio, del que también forman parte las tres empresas catalanas de construcción Suris, Tau Icesa y Proinosa, con un 19 por ciento, y BKW, con un 5 por ciento. El consorcio se encargará de la construcción y de la explotación de dicha planta de tratamiento en un plazo de 15 años. Este proyecto supone una inversión de 80 millones de euros para ampliar, mejorar y adaptar la planta de valorización energética que ya existe, cuya potencia será de 14 megavatios.