Sebastián se compromete a evitar la retroactividad y pide un esfuerzo al sectormadrid. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, se reunió ayer con las principales patronales de energías renovables para analizar el tijeretazo propuesto a las primas y buscar una solución a corto plazo para evitar una fuerte subida del recibo de la luz en los próximos años. Las eléctricas, tal y como adelantó elEconomista, plantearon que los sectores difusos contaminantes -como el transporte- paguen una parte del desarrollo de las renovables. Esta propuesta consistiría en crear un céntimo verde en gasolinas, butano y gas para contribuir a desarrollar las energías limpias con la ayuda de los sectores que no serán capaces de alcanzar los objetivos propuestos por la Comisión Europea. El Ministerio de Industria se comprometió a analizar esta propuesta que cuenta con el respaldo de Unesa y de los grandes consumidores, pero a largo plazo, y les pidió un esfuerzo para alcanzar un acuerdo en el corto plazo. La reunión, que comenzó a las seis y media de la tarde, acabó a tiempo para poder ver el partido de la Selección española. Entre los goles que se intentaron jugar en dicho encuentro, el ministro de Industria se comprometió a no tomar ninguna medida con carácter retroactivo, pero lo que no descartó es que se pudieran poner límites por horas al cobro de algunas tecnologías, una medida que se plantea dentro de las posibilidades que incluye la normativa vigente. Industria tampoco descarta que se puedan producir recortes en otro tipo de tecnologías. Sobre el decreto antifraude para la energía fotovoltaica, las patronales plantearon al Gobierno que se pudiera hacer un cambio voluntario de las plantas para pasar de la regulación del decreto 661 al 1578 -es decir, cobrar una menor retribución- para evitar que el sector tenga que hacer frente a la desaparición de numerosas empresas. Industria además ha llegado ya a un acuerdo con la energía eólica sobre el futuro de su retribución. Las patronales han acordado con el Gobierno volver a reunirse para seguir trabajando en un solución que pueda ser aceptable para todas las partes. Industria tiene de plazo hasta el 1 de julio.