La Caixa quiso fichar a Juan María Nin, consejero delegado de Banco SabadellBarcelona. Un asunto secundario pero no menor es: ¿quién sucederá a Isidre Fainé en la dirección general de La Caixa? Fainé lleva meses sondeando el mercado para encontrar un recambio.El primero de la lista fue el consejero delegado de Banco Sabadell, Juan María Nin. Este ejecutivo del antiguo Banco Central Hispano fue fichado por el presidente del Sabadell, Josep Oliu, para guiar el crecimiento del banco catalán. Nin dejó el Santander y volvió a su Barcelona con un reto laboral de primer nivel. Cuando Fainé le llamó, Nin se lo comunicó a Oliu, que rápidamente bloqueó la operación. El Sabadell no podía prescindir de sus mejor hombre.Oliu le ofreció a Fainé una alternativa: Adolf Todó, un hombre de su confianza que dejó el Sabadell para reconducir Caixa de Manresa, una entidad que el Banco de España seguía de cerca. Desde entonces esta caja no sólo ha vuelto a la senda de los beneficios, sino que además se ha convertido en una entidad puntera en la gestión de fondos de inversión.Fainé no se conformó con la solución que le dio Oliu y tanteó a Jaume Guardiola, un antiguo subdirector de Banca Catalana enrolado en las filas del BBVA. Según fuentes financieras, la oferta nunca se llegó a concretar.Todó es un hombre ambicioso. Salió del Sabadell porque "me di cuenta de que Oliu siempre sería el jefe en el banco y yo quería asumir nuevas responsabilidades", señaló en su día.Desde su cargo en Caixa Manresa, Todó ha escrito el libro El gran horizonte en el que explica la fábula de un delfín que abandona las aguas tranquilas de su entono habitual para adentrarse en el océano abierto. Todó recomienda con este relato que los directivos asuman riesgo y nuevos retos: algo que ahora él mismo hará en La Caixa.