En España todavía existen 12 millones de televisiones de tubo madrid. La televisión de tres dimensiones no se abrirá paso en la mayoría de los hogares españoles hasta 2012, según las previsiones de mercado que baraja Toshiba. Ese año las ventas alcanzarán 7 millones de unidades, aunque la verdadera eclosión de esta nueva tecnología, respaldada por las grandes productoras de cine para combatir la piratería, se alcanzará en 2013, con un parque instalado próximo a los 46 millones de unidades. Hasta entonces las pantallas LCD de televisión de alta definición con conexión a Internet serán las auténticas reinas de la programación casera, entre otras razones porque serán más baratas y ofrecerán funcionalidades propias de un ordenador para comunicarse con otros dispositivos conectados a la Red. Toshiba, con una cuota de mercado del 3 por ciento en Japón y del 3 por ciento en Europa, ha apostado con firmeza por el segmento de las televisiones LCD, que este año experimentará un crecimiento del 20 por ciento (5,3 millones de unidades), impulsado en primera instancia por el apagón analógico y la Copa del Mundo de Fútbol que estos días se celebra en Sudáfrica. Pese a las masivas compras contabilizadas en los cinco primeros meses del año (2,5 millones), en España quedan todavía por sustituir cerca de 12 millones de televisiones de tubo, según la multinacional japonesa. Sin duda un buen nicho de negocio para quien quiera aprovecharlo.