Le gana el pulso a sus competidores Acciona o Inmobiliaria Osunamadrid. El grupo de capital riesgo Carlyle ha comprado a Telefónica su sede en Barcelona, el edificio Estel, en la avenida de Roma, por unos 220 millones de euros, informa Efe, que cita fuentes del sector. Portavoces de Carlyle y de Telefónica han declinado confirmar esta noticia. La compraventa, que es la operación inmobiliaria más importante del año en la capital catalana, que ha estado asesorada por la firma de consultoría Aguirre Newman. Carlyle se ha impuesto en la fase final a grupos como Acciona o Inmobiliaria Osuna y ha ganado una subasta que había despertado gran interés en todo el sector inmobiliario al ser el paquete de vivienda libre más importante que saldrá a la venta en el centro de Barcelona en los próximos años. Carlyle, cuyo director es Pedro de Esteban, se hace así con 38.000 metros cuadrados para uso residencial, en los que se prevé construir 350 viviendas, además de 4.000 metros cuadrados para uso comercial y cuatro plantas subterráneas de aparcamiento, en un inmueble que precisa una importante rehabilitación, informa la agencia Efe.Todas las viviendas del edificio Estel que en principio promoverá Carlyle estarán en una zona muy bien comunicada, junto a la nueva estación del AVE de Sants y la reformada avenida de Roma, que se está reconvirtiendo en un paseo entre la calle del Comte d'Urgell y dicha estación. Telefónica tiene previsto ocupar el edificio todavía durante tres años, hasta que esté lista su nueva sede junto al Fórum, por lo que la compañía que preside César Alierta pagará a Carlyle un alquiler y el grupo inversor se garantiza la rentabilidad durante este período. La nueva sede de Telefónica en Barcelona la construirá el Consorcio de la Zona Franca (CZF) en el número 00 de la Diagonal y en el edificio invertirá más de 70 millones de euros para que la operadora telefónica se instale con un alquiler de larga duración. La compraventa se enmarca en el convenio que en su día firmó Telefónica con el ayuntamiento de Barcelona. El fondo de Carlyle, sin contar esta operación, ha cerrado cinco compromisos por 400 millones.