madrid. Aunque la Fundación tiene una estructura de personal mínima, logra actuar con una presencia en los cinco continentes en los que acumula casi 600 proyectos. La clave es que en cada país hay un responsable de la sociedad. En el caso de España, Ignacio Agreda lleva las riendas del proyecto. El también máximo responsable de Comunicación del Grupo en el país organizó con la supervisión de Felicidad Cristóbal una acción humanitaria con motivo del Día Mundial del Voluntariado. 25 trabajadores de la empresa, entre los que se encontraba Gonzalo Urquijo -número uno del gigante siderúrgico en España- pintaron la Parroquia de Valdemingómez (Madrid), que sirve de refugio y ayuda a muchos enfermos toxicómanos que acampan en el poblado chabolista cercano. Ese día se organizaron actividades similares en 45 fábricas de 27 países.