La compañía francesa comprará tres empresas en Españaparís. "Decidan lo que decidan los tribunales y el regulador bursátil francés (AMF), estoy convencido de que lograremos paralizar este año la oferta en acciones presentada por Sacyr Vallehermoso para controlar nuestra compañía". Con esta rotundidad, Jean-François Roverato, presidente de Eiffage, resumió ayer la estrategia que seguirá si el Tribunal de Comercio de Nanterre y la AMF dictaminan en favor de Sacyr en la batalla legal que lidian las dos compañías.Desde que Roverato anuló los derechos de voto de 89 inversores españoles, dueños del 17,5 por ciento de Eiffage, y consiguió vetar la entrada de Sacyr en el consejo del grupo galo, el enquistamiento entre las dos compañías ha ido en ascenso.La empresa presidida por Luis del Rivero, dueña del 33,2 por ciento del grupo francés, ha recurrido ante los tribunales y ante la AMF, además de haber lanzado un opa con canje de acciones.Operación que los directivos de Eiffage no están dispuestos a dejar prosperar. Aunque los accionistas puedan considerar atractiva la oferta española, para la cúpula gala es prioritario paralizar la opa en curso, pendiente todavía de recibir el visto bueno de la AMF. "Ahora no tenemos nada que dialogar con Sacyr. Insistimos en que no son bienvenidos en nuestro accionariado porque son competidores", dijo Roverato, que ha denunciado ante los tribunales un supuesto concierto entre los inversores españoles. "La justicia va muy lenta y habrá que esperar la decisión de los jueces, pero estoy plenamente convencido de que si la decisión es en contra de nuestros intereses, el Consejo de Administración de Eiffage recurrirá esta decisión, con la voluntad de paralizar la oferta publica de intercambio de acciones que presentó Sacyr a finales de abril", añadió el presiden te Eiffage.La vía que seguirá para bloquear la opa será recurrir al Tribunal Correccional de París, máxima instancia judicial en materia penal, que permitiría frenar la oferta española, al menos, durante un año.Pero las tretas de Roverato para intentar frenar a Sacyr no se limitan a los tribunales. Además, tiene un plan B, que consiste en hacer creer que el grupo español es un competidor, argumento válido para vetarle la entrada en el consejo, como hizo, por ejemplo, FCC con Acciona. Dispuesto a convertir realmente a Sacyr en un competidor, Eiffage prepara varias adquisiciones en España. Actualmente, su filial Eiffage Ibérica, que engloba todas sus operaciones en España y Portugal, sólo representa el cinco por ciento del negocio total de la compañía. Cifra que el grupo quiere incrementar y, para conseguirlo, comprará este año tres compañías: una en Barcelona, dedicada a la gestión de canteras; otra dedicada de fabricación de automatismos para instalaciones eléctricas en Alicante; y en Valencia, una dedicada al mantenimiento de carreteras, según desveló el nuevo consejero delegado, Benoit Heitz.En total, Eiffage prevé invertir 200 millones de euros en 2007. "En España y en los países del Este europeo, sobre todo en la República Checa. En España, asegura que su objetivo para por alcanzar unos ingresos de 900 millones en 2010. Actualmente, su facturación se reduce a 365 millones.