La empresa sólo puede hacer frente al 34% de la deuda con sus clientesmadrid. Arte y Naturaleza tiene un agujero de 283 millones de euros y sólo puede cubrir el 34,1 por ciento de la deuda que ha contraído con sus más de 24.000 clientes. Según el informe preliminar elaborado por la administración concursal, al que tenido acceso elEconomista, la compañía sólo posee activos por valor de 146,56 millones mientras que su endeudamiento asciende a 429,58 millones. La empresa, que está actualmente inmersa en concurso de acreedores, ofrecía altísimas revalorizaciones por la inversión en obras de arte. El problema es que tasaba hasta seis veces por encima del precio, según los servicios de tasación de Durán Subastas, la firma contratada por la administración concursal. Y lo peor para los inversores es que la valoración también podría verse reducida en caso de "venta forzada o apresurada", tal y como se presupone que va a pasar. Las obras de los clientesLos administradores advierten de que la empresa incluyó en el inventario entregado sólo las obras que no habían sido todavía asignadas a los clientes por entender que eran propiedad de éstos. Sin embargo, la administración concursal entiende que siguen siendo de su propiedad, puesto que es depositario de forma "pública, no oculta, pacífica y no interrumpida". El informe detalla, asimismo, el "gran número de irregularidades contables" detectadas, así como la existencia de "una doble contabilidad y falta de control interno de la sociedad". Los administradores advierten por ello que los datos recogidos no representan de forma adecuada la situación patrimonial y financiera de la sociedad. Entre 2005 y 2006, Arte y Naturaleza pagó comisiones por un importe de 35,4 millones de euros, que no aparecen registrados en la contabilidad. Tal y como adelantó este periódico, la compañía montó un entramado de sociedades en África con un delincuente, Miguel Palacios Massó, investigado por la Guardia Civil por falsificación de pasaportes y documentos de todo tipo de un país ficticio a través de Internet. Además, su ex presidente, Guillermo García del Toro, está imputado en Pontevedra por un presunto caso de blanqueo de dinero a través de la firma procedente del narcotráfico. La situación es tan grave que el juez tuvo que apartar de la gestión a los antiguos directivos, incluido García del Toro, tras comprobar que estaban saqueando la compañía y llevándose de la misma dinero y obras de arte antes de que se hiciera el inventario de los bienes y se estableciera su activo. La empresa había presentado en los juzgados un informe de acreedores en el que sólo reconocía un 7 por ciento de la deuda contraída con los mismos. Aunque en los contratos firmados con los clientes se comprometió a pagar 507,8 millones por la recompra de las obras -cobró por las mismas 390,9 millones, un 30 por ciento menos-, ahora dice que sólo debe 37 millones de euros. Pero el problema no acaba ahí. La empresa asegura que tiene sólo 7.682 acreedores y, de acuerdo con sus listas oficiales, firmó un total de 24.821 contratos. Es decir, sólo reconoce como válidos un 30 por ciento de los mismos.Los administradores, en su informe, ponen de manifiesto que Arte y Naturaleza participaba en un entramado de 11 sociedades en las que poseía una participación mayoritaria. El total de saldos deudores a empresas del grupo alcanzaba en 2006 los 8,1 millones de euros. ¿Quiénes están detrás de esas empresas? Es lo que tendrá que descubrir el juez.