La plaza de Las Ventas se convierte en punto de encuentro durante la feria de San IsidroLa feria de San Isidro ha comenzado con menos fuerza en el ruedo que en los tendidos. La Monumental ve los atardeceres llena hasta la bandera y salpicada de las pulseritas naranjas que les encasquetan este año a los invitados vip. El invento tiene todo menos glamour. Menos mal que Juan José Hidalgo, el empresario que más afición está demostrando hasta el momento, no se deja marcar. O por lo menos, no luce la seña desde su barrera. A la espera de que comience la semana de los carteles estrella (Ponce, El Juli, Castella) y se dejen ver Juan Abelló y lo más granado del panorama financiero, Ramón Calderón ha sido el que se ha paseado por allí muy contento después de que el Madrid alcanzase el liderazgo. En el callejón contó sus hazañas a habituales como Fermín Lucas, director general de Ifema. Fernando Martín y Santiago Aguado, ambos de la directiva del equipo blanco durante la época de Florentino Pérez, son otros de los habituales, como Javier Aresti, antiguo consejero delegado de BBVA y uno de los mejores aficionados de Bilbao. Desde el País Vasco también han bajado a la feria la ganadera Dolores Aguirre y su marido, Federico Lipperheide, otro histórico de Neguri. Fernando Peña, de Azulejos Peña y ganadero de postín, presume de hijas, Ana y María José, herederas del imperio azulejero, y Pedro Trapote, propietario de Joy Eslava y Pachá e integrante de la comitiva de Calderón, de esposa: Begoña. Miguel Ángel Rodríguez, ex portavoz del Gobierno de Aznar y presidente de Carat, se aburrió con los nueve toros que saltaron al ruedo el jueves, pero por lo menos se entretuvo con los comentarios que corrían por la plaza sobre la ex de Gonzalo Muñoz. La susodicha está implicada en el caso Malaya. La marquesa de San Eduardo, con insigne joyería en el barrio de Salamanca de Madrid; Miguel Ángel Gozalo, ex presidente de la Agencia Efe; los Martín Sanz, herederos de los transportes de Cesáreo Martín Sanz; González de Caldas, en versión apoderado, o Pedro Ábrego, dueño del Asador Donostiarra y el Txistu, son otros de los personajes que se dejan ver cada tarde por la calle de Alcalá.