Los consejos de Caixanova y Caixa Galicia sellan un preacuerdo sin designar las presidenciasLa negociación sobre la cúpula continúa para cerrar un pacto definitivo en los próximos díassantiago de compostela. Caixa Galicia y Caixanova cerraron ayer su fusión ¿totalmente? La fuerte presión ejercida por la Xunta de Galicia y el Banco de España provocó el cierre en falso del acuerdo entre las cajas regionales, dejando pendiente uno de los principales escollos en los que ha tropezado reiteradamente el proceso de integración: quién será la primera persona que ocupe la presidencia de la entidad resultante en sus inicios. Aunque el paso dado ayer no contempla la posibilidad de que se dé marcha atrás, la Xunta logró arrancar a las entidades un preacuerdo por el que se establece una presidencia y una copresidencia rotatoria de tres años (18 meses cada una de duración). Pero dejó en manos de las cajas la patata caliente de decidir quién será la primera en ocupar el cargo de máxima responsabilidad al frente del nuevo grupo financiero que ocupará la quinta posición en el ranking nacional. Según aseguran fuentes de las entidades involucradas en el proceso de integración, esa será una decisión que las comisiones negociadoras adoptarán en los "próximos días" -previsiblemente hoy o mañana- aunque otras fuentes dan por hecho que el presidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, será el primero en ocupar un cargo que transcurrido un año medio dejará en manos de un representante de Caixa Galicia, aún por determinar. Sobre lo que ya existe un preacuerdo firme es sobre quién ocupará los puestos ejecutivos de la caja resultante. Según el pacto suscrito ayer bajo la tutela de la Xunta, José Luis Pego (Caixanova) ocupará la dirección general, mientras que Javier García Paredes (Caixa Galicia) asumirá la dirección general adjunta de la entidad resultante -ver gráfico-. ¿Y dónde tendrán que ir cada mañana a trabajar los integrantes de la nueva dirección de la caja gallega? Depende de su puesto. La sede institucional se ubicará en Vigo -ciudad en la que localiza actualmente Caixanova-, mientras que la operativa y fiscal se mantendrá en La Coruña -donde se halla ahora Caixa Galicia- tras el preacuerdo sellado ayer por las dos entidades. Además, el nuevo consejo de administración contará con un total de 20 miembros, será paritario con diez representantes de cada una de las entidades fusionadas. Mientras se dilucida la persona que ocupará la presidencia de la caja, se arranca otra hoja del calendario de integración a la que tendrá que seguir las respectivas reuniones de los consejos de administración que convoquen sus asambleas para dar luz verde a la fusión. Hay que recordar que esas asambleas se tendrán que convocar con una antelación mínima de quince días. El día de ayer fue sin duda histórico para el mapa financiero de la comunidad gallega. Tras diez meses desde que comenzó este proceso, y mes y medio después del comienzo de las negociaciones oficiales para acometer la fusión de las dos entidades gallegas, por fin hubo pacto, que no tiene marcha atrás. Declaración institucional En una declaración institucional en la residencia oficial de Monte Pío, marco en el cual los equipos de negociación de ambas cajas cerraron el preacuerdo para la fusión, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, acompañado de los presidentes y directores generales de ambas entidades, destacó "el cambio sustancial" que supone este proceso, porque tras décadas compitiendo dos cajas tan vinculadas a territorios diferentes dentro de la comunidad tendrán que acostumbrase a cooperar. En esta controvertida fusión en la que los localismos y personalismos amenazaron el proceso, el presidente hizo un llamamiento a "evitar reproches" por lo acontecido en el pasado y mirar hacia el futuro con unidad y "prevaleciendo siempre el interés general de Galicia". Este hito supone para el titular del Ejecutivo autonómico "el triunfo de la sociedad gallega" que le permitirá a esta comunidad permanecer en el mapa financiero español después de la actual reestructuración del mapa de cajas en el país. Por esta razón, Feijóo elogió un acuerdo que calificó de "generoso, equilibrado y paritario" al que llegaron Caixa Galicia y Caixanova.