No todo se reduce a motores convencionales de gasolina; también están algunos más ecológicos como los híbridos o los de etanol, ya a la venta en algunos países.Una de las principales líneas de investigación de los fabricantes automovilísticos tienen el objetivo de reducir el consumo de gasolina (y gasóil) de sus motores y mejorar a la vez sus prestaciones, es decir, hacerlos más eficientes. Sin embargo, los altos precios que están alcanzando estos combustibles están acelerando un proceso que pretende reducir la dependencia del petróleo para ir aumentando el consumo de combustibles provenientes de fuentes renovables.La última innovación tecnológica presentada en el mercado nacional dentro aún de motores puramente de gasolina se traduce en la tecnología TSI, desarrollada por el grupo alemán Volkswagen y que de momento monta en sus modelos Touran y Golf. El primero en salir al mercado es un Golf TSI que con sólo 1.4 litros de cilindrada genera 170 CV de potencia, algo hasta ahora inédito en un vehículo de producción masiva. El secreto es un sistema de doble compresor combinado con la tecnología de inyección directa de gasolina (los FSI), que en definitiva hace que el motor rinda mucho más con menos cilindrada y, por tanto, con menos consumo.Un paso más allá es el que combina la tecnología de los motores de gasolina con motores eléctricos, que son los llamados híbridos. Es el caso en el salón de los modelos que exponen marcas como Toyota, Honda o Lexus. El más conocido en el mercado es el Toyota Prius, que incluso tiene descuentos o precios especiales en alguna comunidad autónoma y en algún municipio por su bajo índice contaminante.Este modelo combina un motor térmico de 1.5 litros de cilindrada y 78 CV de potencia que resulta muy eficiente y mantiene un consumo bajo. En combinación con el motor eléctrico, hace que el conjunto sea muy recomendable para circulación en ciclo urbano.La competencia directa es la nueva generación del Honda Civic Hybrid combina un nuevo motor de 1.3 litros i-V-TEC con un "sistema de asistencia integrada del motor" (IMA) que resulta más eficiente que el modelo anterior.Según declara la marca, ofrece un 20 por ciento más de potencia, y en lo que a prestaciones se refiere, esta combinación consigue las mismas prestaciones que un motor 1.8, con la diferencia de que consume lo que un 1.3 y reduce en gran medida las emisiones contaminantes.El siguiente escalón son los coches que pueden consumir etanol (que se obtiene de algunos vegetales), ya que reducen considerablemente la dependencia del petróleo, al necesitar en dos de los casos más conocidos hasta sólo un 15 por ciento de gasolina, en una mezcla que se conoce como E85.En este campo General Motors exhibe la nueva generación de su Saab Biopower, cuyo motor de 2.0 litros de cilindrada puede consumir indistintamente cualquier mezcla de gasolina o etanol hasta con un 85 por ciento del segundo (el E85).Las modificaciones del motor convencional se concentran sobre todo en los materiales de determinados conductos, que ahora son más resistentes a la abrasión que provoca el etanol. Además, cuenta con un sistema que controla la mezcla en el depósito y ajusta los valores de inyección y régimen del motor para dar el mejor rendimiento.Este coche, 1.000 euros más caros que la versión normal, empezará a venderse a finales de este año o principios de l próximo.