Rijkman Groenkink renuncia a entrar en el Consejo de Supervisión de la petrolera Shellmadrid. De nuevo se tuercen los planes para el Consejo de Administración de ABN Amro. Su consejero delegado, Rijkman Groenkink, ha solicitado que se retire su candidatura para formar parte del Consejo de Supervisión de la petrolera Shell, según informó ayer el banco a través de un comunicado. La razón de esta renuncia es que quiere dedicar "toda su atención" a ABN Amro, "dados los actuales movimientos corporativos que rodean al banco", agrega la nota. No sólo Groenkink ha tenido que cambiar sus planes por la tormenta que se ha desatado por la compra de ABN Amro, por la que pugna Barclays y el consorcio del Santander. La semana pasada su director financiero y también miembro del consejo Hugh Scott-Barrett, anunció que dejará de trabajar en la entidad holandesa a partir del próximo 1 de agosto tras presentar su dimisión. Barclays defiende su ofertaPor otro lado, el consejero delegado de Barclays, John Varley, hizo ayer una defensa de su oferta para comprar ABN Amro, valorada en 63.000 millones de euros. El número uno del banco británico explicó que la fusión entre ambas entidades debería aumentar su diversificación de productos y acelerar su crecimiento (sobre todo en la industria de servicios financieros), durante los próximos diez años.