Conthe y Carrascosa tenían grandes responsabilidades en el desarrollo de 'Mifid'madrid. La onda expansiva del terremoto que está sacudiendo la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ya se está extendiendo a Europa. Las dimisiones de Manuel Conthe como presidente y Antonio Carrascosa como director general de entidades han dejado un importante hueco en la asociación de reguladores europeos, conocida como CESR, en un momento muy delicado. El grupo de supervisores está trabajando ahora en el desarrollo final de la Ley que va a cambiar el funcionamiento de los mercados financieros en elos próximos años, la llamada Mifid, que tiene entre sus ambiciosos objetivos aumentar la competencia en la oferta de servicios y aumentar la protección a los ahorradores finales.Y, en esta fase decisiva, Conthe era el presidente del grupo de expertos encargado de establecer los normas de comportamiento concretas que deberán establecer las entidades financieras. De hecho, todavía sigue apareciendo como máximo responsable de este grupo de trabajo en la página web de CESR, aunque pronto desaparecerá, ya que este cargo lo ostenta en función de sus responsabilidades en la CNMV y no a título personal.Así se lo confirmó ayer a este diario Victoria Powell, portavoz de CESR: "Ahora queda una vacante que se debe cubrir. Los presidentes de los otros supervisores europeos buscarán un acuerdo para ver quén se sitúa al frente de este grupo de trabajo", explica.Powell reconoció que esta búsqueda puede prolongarse un tiempo, que sería precioso para el desarrollo de una legislación que ya va con retraso. De hecho, el pasado 25 de abril la Comisión Europea expedientó a 24 países europeos, entre ellos España, por no tener dispuesta la aplicación de Mifid en su ámbito nacional. Debería haber estado lista en enero pasado para entrar en funcionamiento en noviembre. Menos peso para España Eso sí, la portavoz del CESR confían en cumplir los trámites que tienen marcados para desarrollar en la práctica Mifid: "Los grupos de trabajo se pueden seguir reuniendo", dice Powell, quien asegura además que el tiempo que se pierda en buscar y nombrar a un nuevo presidente en sustitución de Conthe se podría recuperar más adelante.Sin embargo, en uno de esos grupos de trabajo, que desarrollan aspectos concretos de Mifid, también tendrán que cubrir otra baja importante: la de Antonio Carrascosa, que también está saliendo de la CNMV tras la llegada de Julio Segura a la presidencia. Aunque su perfil dentro del CESR es menor, estaba al frente del equipo de expertos que desarrolla unos puntos vitales para un buen número de entidades financieras españolas: las comisiones a terceros y los incentivos en la venta de fondos, conocidos en inglés como inducements.El borrador original de esta materia perjudicaba a las firmas españolas por su modelo de negocio y, de hecho, provocó fuertes quejas por parte de Inverco, la asociación de los fondos; Banco Santander; el Fondo de Garantía de los Inversores (Fogaín); la Asociación Española de la Banca (AEB) y el propio Comité consultivo de la CNMV, encabezado por el vicepresidente de la asociación, Carlos Arenillas. Ahora se estudia una segunda versión del texto.A este puesto sí podría llegar un nuevo delegado español, pero lógicamente le costaría tomar el pulso de una normativa tan técnica y especializada para un cargo de repercusión paneuropea.