La catalana Constructora d'Aro edifica a base de módulos que se van acumulándose y reducen el coste de la obrabarcelona. El encarecimiento del precio de la vivienda y la necesidad de encontrar espacios más reducidos crea nuevas ideas para las constructoras consigan obras. Así lo ha hecho la catalana Constructora d'Aro, con sede en Manresa (Barcelona), que ha desarrollado en el Instituto de Tecnología de la Construcción (ITeC) un sistema de edificación de viviendas plurifamiliares basado en módulos tridimensionales apilables los unos con los otros, llamado Compact-Habit. La propuesta de este nuevo concepto se basa en apilar módulos hasta formar edificios enteros, y permite facilitar las condiciones de trabajo de los operarios y aumentar la calidad de la construcción.El sistema, que convertirá los tajos de las obras en gigantescos mecanos, facilita las condiciones de trabajo de los operarios, ya que cada módulo se fabrica industrialmente, de manera que reduce hasta el 60 por ciento el tiempo global del proceso constructivo de un edificio, que en este caso sería de montaje, además de reducir también el impacto acústico en el vecindario y las emisiones nocivas. "Se trata de una opción especialmente idónea para las necesidades de algunos sectores sociales, como los jóvenes o la tercera edad", comenta el presidente de la compañía Josep Tragant. La fabricación en cadena del Compact-Habit tiene el objetivo de reducir el tiempo de construcción, mientras que su modularidad pretende "facilitar la configuración de pisos de diferentes tamaños desde 40 hasta 120 metros cuadrados". Esta propuesta ya ha sido aceptada por la Generalitat para futuras construcciones de viviendas de protección oficial. Uso para vivienda protegidaLa secretaria de la Vivienda del gobierno catalán, Carme Trilla, ha dado su apoyo al nuevo concepto de edificación de Constructora d´Aro. En opinión de Trilla, este tipo de proyecto, que está en fase experimental, encaja con los planteamientos de la Generalitat de crear parques de viviendas de protección oficial (VPO) en alquiler de entre 200 y 300 euros mensuales y destinadas principalmente a jóvenes. El módulo básico, de 40 metros cuadrados, tiene forma rectangular y unas dimensiones similares a los "containers" portuarios.La Generalitat considera que el verdadero problema de los elevados precios de la vivienda de compra es la falta de suelo a precios asequibles para impulsar viviendas accesibles destinadas a jóvenes, ancianos y familias numerosas con rentas bajas. Constructora d'Aro ha experimentado una caída tanto en su cifra de negocio como en su resultado en 2005, el último disponible en el Registro Mercantil. La compañía ingresó 16,72 millones en 2005, por debajo de los 19,41 millones de 2004. En 2005, la empresa ganó 1,24 millones, lo que le supuso ganar menos de los 3,52 millones conseguidos el ejercicio anterior.