madrid. Sando quiere dar el salto al otro lado del Atlántico de la mano del negocio de concesiones. Ahora la compañía explora oportunidades en el mercado estadounidense, principalmente en autopistas, señaló ayer el vicepresidente y consejero delegado del grupo, Luis Sánchez Manzano, en la presentación de los resultados.La estrategia de crecimiento del grupo pasa por diversificar su negocio geográficamente. En dos años el negocio exterior representará el 10 por ciento de los ingresos. Otra de las tareas del grupo es potenciar sus áreas del ladrillo. De hecho, Sando está analizando compras de inmobiliarias o constructoras españolas, siempre manteniendo el control y sin pagar una prima sobre la valoración de la cartera del suelo. Requisitos que hacen más complicado este movimiento.Salir al extranjero es otra de sus vocaciones. Ya está presente en Polonia a través de su negocio inmobiliario y espera entrar en Rumanía en breve. Con este modelo, el sector del ladrillo será su fuerte en el modelo futuro de la compañía. La inmobiliaria facturó 160 millones este año y se prevé que alcance los 500 millones en 2009. Sin embargo, también potenciarán su negocio industrial y tecnológico. Los resultados de 2006 fueron viento en popa. El beneficio se triplicó por ingresos extraordinarios.