Perdida la ocasión de presionar ayer contra que E.ON y Enel troceen la eléctricaberlín. Según sus propias palabras, José Luis Rodríguez Zapatero no aprovechó su desplazamiento a Berlín para interesarse por la integridad de Endesa, y la posibilidad de que Italia y Alemania estén negociando trocearla y repartirla entre sus respectivos gigantes energéticos: Enel y E.ON. Y eso que tuvo la oportunidad de verse tanto con la canciller alemana Angela Merkel, como con el primer ministro italiano Romano Prodi. Según informaciones de la semana pasada, ambos se habrían reunido en Roma para tratar, entre otros temas, la división de Endesa. "Endesa es importante, pero no tanto. Estamos en Berlín para celebrar el 50 aniversario de Europa", contestó Zapatero al ser interrogado sobre si pensaba pedir explicaciones a sus homólogos sobre sus intenciones y las de sus respectivas empresas energéticas. El presidente español se esforzó en resaltar el carácter histórico del proceso de integración europea. "Quizás Endesa es un ejemplo de la construcción europea y de la libertad de movimientos de capitales". A la pregunta de si el Gobierno intervendría ante un hipotético desmembramiento de Endesa, comentó: "Aún no estamos ante ese escenario. Ahora tenemos una opa [la oferta de E.ON] y una contra opa [de la española Acciona junto a la italiana Enel]. Hasta que no veamos cómo se conforma la mayoría accionarial y sus planes, el Gobierno no debe pronunciarse y sólo debe ser garante de la legislación aplicable". El presidente había puntualizado que "el Gobierno no gobierna el mercado; las decisiones las toman el mercado y las empresas privadas. El eléctrico es un sector donde existe una legislación que indirectamente afecta al proceso". Y subrayó: "Estamos en una economía de mercado, unida y sin barreras. El Gobierno tiene la obligación de, en sectores como la energía, velar por el interés general".